Demócrata a carta cabal, Duarte reunió a un grupo de jóvenes brillantes, decididos y valientes.
A punto de cumplirse el 179 aniversario de nuestra separación, fundación e independencia, los dominicanos estamos obligados a continuar elevando a la gloria a nuestro patricio principal Juan Pablo Duarte y Díez.
Duarte fue el ideólogo esencial, el amante de las libertades y el motor principal para crear un país ‘libre de toda potencia extranjera que se llamará República Dominicana’.
Demócrata a carta cabal, Duarte reunió a un grupo de jóvenes brillantes, decididos y valientes, para emprender la tarea de liberar la parte Este de la isla Española, de las tropas haitianas que desde 1822 nos invadieron con todas sus raras y antidemocráticas costumbres.
Y con el ejemplo personal e incondicional, aporte de sus virtudes y conocimientos, humildad y bienes económicos, Duarte logró el 27 de febrero de 1844 separarnos de Haití.
Sin estar presente en la noche de ese histórico día por encontrarse en el exilio, los ‘muchachos’ formados en el ideal patrio por Duarte, fueron los héroes de esa gran jornada.
Francisco del Rosario Sánchez, Matías Ramón Mella, Vicente Celestino Duarte y otros varones y féminas, se pronunciaron en la Puerta de la Misericordia en esa gloriosa ocasión.
Allí enarbolaron la bandera tricolor, explotaron un ruidoso aldabonazo y juraron por la libertad e independencia dominicana del yugo haitiano.
Más tarde, los siempre conservadores y entreguistas enemigos de esta patria, se unieron para impedir el ascenso al poder de Los Trinitarios, negociaron para entregarnos a otras potencias o acordaron con personeros haitianos.
Y por ello hubo necesidad de volver a la lucha armada contra los españoles, en lo que se llamó la ‘Restauración de la República’, donde Gregorio Luperón y muchos otros defendieron con arrojo y gallardía la independencia total.
Duarte fue tan lejos en sus intenciones que a esta fecha son muchos los que abogan por un país sin ataduras con ningún otro, como él lo enunciara y deseaba. Son muchos los que anhelamos libertades plenas y respeto a nuestros derechos y soberanía, son muchos los que deseamos un país con justicia para todos y repartición de riquezas y trabajos.
En este 27 de febrero, inclino mi frente ante los ideales de Juan Pablo Duarte, al considerarlo el más grande de todos los dominicanos, incluyendo a quienes más tarde enfrentaron con valentía tropas interventoras de otros países, u otros que han pensado en ‘alinearnos’ a naciones con ideales antidemocráticos.
¡Viva Duarte siempre!
22 de febrero de 2023.