Todo ello en un discurso en el que ha dicho que, aunque Iberoamérica engloba a gobiernos y países con "legítimas diferencias políticas".
SANTO DOMINGO, 25 Mar. (EUROPA PRESS) – El presidente de Chile, Gabriel Boric, ha instado a no "callarse" ante la "dictadura familiar" que gobierna Nicaragua, en alusión al régimen de Daniel Ortega y de su mujer, Rosario Murillo, durante su discurso en la XXVIII Cumbre Iberoamericana.
Boric ha aprovechado su turno para condenar medidas como el destierro de opositores y la retirada masiva de ciudadanía a todos aquellos disidentes catalogados como "traidores a la patria", a los que Chile ha ofrecido la nacionalidad.
Todo ello en un discurso en el que ha dicho que, aunque Iberoamérica engloba a gobiernos y países con "legítimas diferencias políticas", también comparte "valores comunes", como por ejemplo el consenso de que "fuera de la democracia no hay libertad ni dignidad posible".
En este sentido, Boric ha recordado la ola recientes de incendios en el sur de Chile para ponerla como ejemplo de hasta qué punto fortalecer el espacio iberoamericano puede derivar en soluciones prácticas. "Escribí personalmente a varios de ustedes (para pedir ayuda). Todos me respondieron", ha enfatizado.
Según Boric, "la solidaridad demostrada por la comunidad iberoamericana fue realmente conmovedora" y "la respuesta al llamado de ayuda fue inmediata e impecable", también "cruzando el océano" desde España y Portugal.
Cumbres como la de República Dominicana "generan ese espíritu de solidaridad" y "nos permiten salir adelante juntos en los momentos difíciles", ha enfatizado Boric, que ve margen para seguir avanzando: "Podemos hacer más aún".