La sustancia prohibida llegó al puerto de Valencia en varios contenedores con la tapadera de cajas de bananas.
Dos hombres han sido condenados, cada uno a cuatro años de prisión y una multa de 1.800.000 euros. por introducir grandes cantidades de cocaína en España dentro de bananas simuladas enviadas desde República Dominicana.
La Audiencia de Málaga tomó la decisión con la circunstancia que atenúa la pena de dilaciones indebidas y confesión tardía. Además, un tercer procesado fue absuelto.
La sentencia del alto Tribunal andaluz señala que uno de los condenados y el acusado que resultó absuelto crearon en 2016 una empresa con domicilio social en Málaga que estaba inicialmente dedicada al comercio al por mayor de frutas y hortalizas.
El segundo condenado tenía experiencia en el ámbito de importación de frutas y realizaba labores comerciales, proporcionando los contactos y gestionando el transporte desde América y la logística en territorio nacional.
Un reporte de Europa Press indica que los contactos del segundo condenado en la República Dominicana permitieron que acordara con el otro procesado "proceder a introducir en España importantes cantidades de cocaína".
Se precisa que para poder identificar a los destinatarios, se sustituyó la fruta simulada por otras, volviendo a cerrar las cajas.
La operación para introducir bananas como tapadera culminó en octubre de 2016 cuando llegó al puerto de Valencia en un buque varios contenedores cuyo contenido declarado eran 1.080 cajas de bananas.
Funcionarios de la Guardia Civil y de Vigilancia Aduanera detectaron siete cajas con una densidad distinta al resto y, una vez inspeccionadas, encontraron en su interior bananas simuladas que contenían cocaína con un peso de 6.931 gramos.
La agencia periodística precisa que para poder identificar a los destinatarios, se sustituyó la fruta simulada por otras, volviendo a cerrar las cajas.
Estos palés fueron cargados en un camión con destino a la empresa malagueña, donde se descargó la mercancía y se colocó en una cámara frigorífica. Los dos acusados fueron al lugar para ver la mercancía y fueron detenidos al intentar marcharse del recinto.
El Tribunal señaló que "dada la dificultosa ocultación" de la droga, esta "no podía ser extraída en teoría sino por los destinatarios finales del cargamento
Tras la intervención, dos de los investigados hablaron por mensaje con un agente de Aduanas de una empresa de transportes para que pusieran a disposición los palets, cajas y esquineras de los embalajes en que venía el cargamento de bananas que había de ser destruida.
Una nueva inspección por parte de la Guardia Civil y Vigilancia Aduanera permitió encontrar 55 pastillas de cocaína y un doble fondo con otros 4.855,47 gramos.
El Tribunal señaló que "dada la dificultosa ocultación" de la droga, esta "no podía ser extraída en teoría sino por los destinatarios finales del cargamento, que eran los dos acusados" que han resultado condenados.
La sustancia intervenida tenía un valor de venta al por mayor de 598.629 euros.
La sentencia fue recurrida por la empresa de transportes que solicitaba una indemnización por los gastos inherentes a los contenedores incautados, pero tanto el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía como la Sala de Málaga, han declarado que no procede dicha indemnización.