Destaca que la oposición y el gobierno en República Dominicana no polarizan la opinión pública ni se insultan.
Santo Domingo. – Juan Luis Cebrián, presidente de honor del diario español El País, ha señalado que República Dominicana se está convirtiendo en la capital del Caribe, debido a su excepcional estabilidad, lo que lo convierte en un país confiable para invertir y trabajar.
Cebrián señaló que la oposición y el gobierno en República Dominicana no polarizan la opinión pública ni se insultan, lo que muestra un ambiente político más estable y predecible. En 2022, el país recibió US$3.802,2 millones en inversión extranjera directa, superando los niveles de 2021 y 2019 en 22,57% y 25,85%, respectivamente, y marcando un nuevo récord. Cebrián, quien también es escritor y filósofo, cree que si el país sigue invirtiendo en educación, tiene un gran futuro a corto y largo plazo.
En entrevista con la periodista Katherine Hernández en el programa "Siendo Honestos", Cebrián también se refirió a la crisis que enfrenta la democracia y la opinión pública. Afirmó que el problema no es el periodismo sino el propio modelo democrático, que ha sido sustituido por una democracia tecnológica y digital, empeorando las condiciones de la democracia representativa durante la pandemia. Destacó que la identidad y las emociones ahora son más importantes que la razón, la Ilustración y el estado de derecho, lo que lleva a un retroceso democrático.
Respecto a los desafíos que plantea la inestabilidad de Haití y su impacto en República Dominicana, Cebrián cree que la respuesta a los problemas del vecino requiere de un compromiso internacional. Señaló que República Dominicana tiene un problema particular porque comparte frontera con el país más pobre de la región y posiblemente del mundo, que es un estado fallido donde las bandas y mafias gobiernan y se pelean entre sí.
También resaltó que la intervención de Naciones Unidas ha contribuido a incrementar los conflictos en lugar de resolverlos, dificultando la situación de República Dominicana, cuya primera independencia fue precisamente de Haití.
En conclusión, la perspectiva positiva de Cebrián sobre la estabilidad política y las oportunidades de inversión de la República Dominicana es un importante respaldo que puede atraer a más inversores al país. Sin embargo, su advertencia sobre los desafíos que enfrenta la democracia y la opinión pública a nivel mundial debería servir como una llamada de atención para todos, incluidos políticos, periodistas y ciudadanos, para garantizar que prevalezca la democracia y se respete el estado de derecho.
