Crecen los llamamientos al boicot de productos y empresas suecas y a la unidad en defensa de la religión y los valores musulmanes
El mundo musulmán se ha volcado en un boicot al consumo de productos y empresas suecas en respuesta a la quema de un ejemplar del Corán, un libro sagrado para los seguidores de esa fe religiosa, ocurrida en Suecia.
El boicot de productos y empresas suecas en el mundo musulmán ha generado una amplia repercusión y llamamientos a la unidad en defensa de la religión y los valores musulmanes en países como Marruecos, Pakistán, Irak, Irán, Omán y Yemen
La Universidad de Al Azhar, el centro de estudios islámicos suní más prestigioso del mundo, ha instado a los 1.500 millones de musulmanes a nivel global a boicotear los productos suecos en apoyo al Noble Corán.
Además, dicho centro mulsulman ha llamado a los gobiernos de países musulmanes y árabes a adoptar posturas unidas y serias ante estas agresiones inaceptables, recoge Europa Press.
Marruecos ha convocado al encargado de negocios sueco en Rabat para solicitar explicaciones por la quema del libro sagrado. El Ministerio de Asuntos Exteriores marroquí destacó que el Gobierno sueco autorizó una manifestación en la cual se quemó un ejemplar del Sagrado Corán frente a una mezquita de Estocolmo.
El funcionario marroquí ha calificado la quema del Corán como un acto irresponsable y hostil que desprecia los sentimientos de más de 1.000 millones de musulmanes.
Al Azhar ha elogiado la postura de Rabat y ha pedido a los países islámicos y árabes adoptar posturas similares para expresar su rechazo a estas violaciones y provocaciones continuas hacia las masas musulmanas en todo el mundo.
En redes sociales, han surgido carteles llamando al boicot con nombres y logotipos de empresas en respuesta a las provocaciones suecas.
La universidad también ha expresado su agradecimiento al presidente ruso, Vladimir Putin, quien ha portado una copia del Corán y ha resaltado la santidad de este libro y su respeto por el islam.
El Consejo de Notables Musulmanes de Al Azhar, liderado por el gran imán Ahmed al Tayeb, también ha condenado la quema del Corán y ha expresado un rechazo categórico hacia estos actos criminales que manifiestan odio y racismo inaceptables.
En redes sociales, han surgido carteles llamando al boicot con nombres y logotipos de empresas en respuesta a las provocaciones suecas.
Además, líderes musulmanes han instado a sus seguidores a cumplir con la decisión del Comandante de los Fieles, el rey Mohamed VI de Marruecos, de boicotear los productos suecos.
En Pakistán, la etiqueta #BoycotSweden se ha vuelto tendencia en el país después de un llamamiento liderado por el partido extraparlamentario Partido Istehkam e Pakistan (IPP), que ha condenado la profanación del Corán con el permiso del Gobierno sueco y ha calificado este acto como descorazonador y vergonzoso.
El primer ministro paquistaní, Shehbaz Sharif, ha manifestado su pesar por este acto "vil, despreciable y atroz" que va en contra del Derecho Internacional y que hiere los sentimientos de los musulmanes de todo el mundo.
La quema del Corán ha sido condenada por líderes religiosos, políticos y la sociedad en general, quienes exigen respeto hacia sus creencias y un alto a estas provocaciones ofensivas.
Varios partidos políticos kuwaitíes también han condenado al Gobierno sueco por tolerar esta quema impulsada por el racismo y la ignorancia,y han instado a los gobiernos occidentales a respetar la religión islámica y evitar provocaciones hacia los musulmanes.
Desde Yemen, el Partido Social Nacionalista ha criticado a los "extremistas" que quemaron el Corán con el permiso de las autoridades suecas, considerando este acto como racista y alimentador del odio. También se han sumado al llamamiento al boicot de los productos suecos.
En Omán, el gran muftí de Omán, el jeque Ahmed bin Hamad al Jalili, ha pedido el boicot a los productos suecos y ha mencionado informes que hablan de niños musulmanes separados de sus familias.
Así al Jalili ha instado a boicotear completamente a Suecia y no comprar ninguno de sus productos, así como a cancelar todos los negocios entre Suecia y los musulmanes, ya sea a nivel gubernamental, institucional o individual.
Anteriormente, se informó del asalto a la Embajada sueca en Bagdad, la capital de Irak, por una multitud convocada por un líder religioso en respuesta a la quema del Corán.
La quema del Corán ha sido condenada por líderes religiosos, políticos y la sociedad en general, quienes exigen respeto hacia sus creencias y un alto a estas provocaciones ofensivas.