La Autoridad Palestina ha defendido el derecho del pueblo palestino a defenderse.
La Autoridad Palestina ha decidido suspender todo contacto y colaboración con Israel como medida de protesta por la ofensiva militar llevada a cabo en el campamento de refugiados de Yenín, ubicado en Cisjordania. Esta decisión se suma a la suspensión de la colaboración en materia de seguridad ya la intención de limitar la relación con la Administración de Estados Unidos.
El anuncio fue realizado a través de un comunicado emitido después de una reunión en Ramala, donde la cúpula de la Autoridad Palestina, encabezada por el presidente Mahmud Abbas, invitó a los líderes de los partidos políticos palestinos a una reunión de emergencia. El objetivo es acordar una postura nacional y cerrar filas frente a lo que considera una agresión por parte de Israel.
La Autoridad Palestina ha defendido el derecho del pueblo palestino a defenderse y ha recordado que su misión principal es proteger a su pueblo y dedicar todos sus esfuerzos a ese propósito. Además, ha criticado a Israel por incumplir los logros alcanzados en Áqaba y Sharm el Sheij, declarándolos inválidos y nulos.
En su comunicado, la Autoridad Palestina también ha instaurado a la aplicación de la Resolución 2334 del Consejo de Seguridad de la ONU, que prohíbe cualquier acción que modifique la composición demográfica y el estatus de los territorios ocupados por Israel. Asimismo, ha solicitado la imposición de sanciones a Israel y la intervención del Tribunal Penal Internacional (TPI) para investigar y abrir procedimientos sobre los casos relacionados con los crímenes de guerra.
Por otro lado, la Media Luna Roja palestina ha confirmado que miles de civiles han huido de Yenín debido a la reanudación de la ofensiva militar israelí contra las milicias palestinas. Mientras tanto, las fuentes militares israelíes han asegurado que no ha habido una orden de evacuación y que los palestinos abandonan la localidad por voluntad propia, buscando escapar de los combates.
La suspensión de todo contacto y colaboración entre la Autoridad Palestina e Israel profundizó la tensión en la región y dificulta aún más cualquier esfuerzo por lograr una solución pacífica y duradera al conflicto palestino-israelí. La situación en Yenín sigue siendo preocupante, con la población civil teniendo en cuenta las consecuencias de la escalada de violencia.