El autor explica la importancia de esta tecnología de imagen fisiológica
Por Antonio Contreras Berroa
Descubierta y desarrollada por William Herschel y su hijo John Herschel a principios del S.XIX, también denominado el siglo de la Industrialización, llevó a cabo su implantación a mediados del S.XX en diferentes disciplinas derivadas de la ingeniería.
La termografía clínica es una tecnología de imagen fisiológica que proporciona información sobre el funcionamiento normal y anormal de los sistemas nerviosos sensoriales y simpáticos, el sistema vascular, el sistema músculo-esquelético y los procesos inflamatorios locales. El procedimiento también proporciona valiosa información fisiológica con respecto a condiciones dermatológicas, endocrinas y de mama.
Cuando se usa en un entorno clínico, es un procedimiento de imagen que detecta, registra y produce una imagen (termograma) de las temperaturas superficiales de la piel de un paciente y / o patrones térmicos.
El procedimiento utiliza equipos que pueden proporcionar representaciones tanto cualitativas como cuantitativas de estos patrones de temperatura, sin implicar el uso de radiación ionizante, acceso venoso u otros procedimientos invasivos.
La termografía clínica puede contribuir al diagnóstico y manejo del paciente ayudando a determinar la ubicación y el grado de irritación, el tipo de trastorno funcional y el pronóstico del tratamiento. El procedimiento también puede ayudar al clínico en la evaluación del caso y en la determinación del tratamiento más efectivo.
La termografía clínica es una tecnología de imagen fisiológica que proporciona información sobre el funcionamiento normal y anormal de los sistemas nerviosos sensoriales y simpáticos, el sistema vascular, el sistema músculo-esquelético y los procesos inflamatorios locales.
La utilidad clínica de la termografía no sólo se da en las Ciencias de la Salud humana, también en el campo de la Veterinaria (Pérez Marquez et al 2019- Wats et al 2019-Redaelli et al 2019) o en las Ciencias del Movimiento y del Deporte.
Termografía en el diagnóstico de la sinusitis crónica, en el campo de la ORL, se describen buenos resultados frente a radiografía en el diagnóstico de sinusitis frontal, etmoidal maxilar, (Kalaiarasi et al 2018). Se vuelve a describir las importantes ventajas al no irradiar al paciente y su bajo costo.
El termograma permite entre ver: Abordaje, tratamientos de puntos gatillos miofasciales, técnicas de punción seca/acupuntura termoguiada, Valoración y conexión de las cadenas miofasciales al poder explorar las asimetrías vasculares, la concatenación en el recorrido de éstas en respuesta a las múltiples escuelas cadenistas, Valoración y seguimiento de hallazgos en tejido humano y poder hacer un seguimiento clínico.
El autor es presidente de la Asociación Dominicana de Ozonoterapia.(ASDOOT)