Este aumento en los ciberataques a instituciones educativas se atribuye en parte a la creciente digitalización del sector y su dependencia de las plataformas en línea.
Durante el último curso escolar, se ha registrado un incremento significativo en los ciberataques dirigidos a instituciones educativas y de investigación, convirtiéndolas en el sector con el mayor índice de ciberataques, superando incluso al sector militar, y experimentando un aumento del 11% en las amenazas en Europa en comparación con el año anterior, según un estudio de Check Point Research.
Las instituciones educativas, que incluyen universidades, academias y colegios, han recibido una media de 2,256 ciberataques semanales por organización durante la primera mitad de 2023, en comparación con el sector militar, que ha registrado una media de 1,759 ataques semanales por organización, recoge Europa Press.
Este aumento en los ciberataques a instituciones educativas se atribuye en parte a la creciente digitalización del sector y su dependencia de las plataformas en línea. Los ciberdelincuentes se aprovechan de las plataformas utilizadas por profesores y estudiantes, que a menudo almacenan información confidencial, como registros personales y datos financieros.
Algunas de las amenazas utilizadas por los ciberdelincuentes incluyen el ransomware y el hacktivismo, que han evolucionado y se han adaptado para atacar a organizaciones en todo el mundo.
Como medida preventiva, Check Point ha compartido consejos para mejorar la ciberseguridad en el sector educativo. Se recomienda a las instituciones escolares mantenerse informadas sobre las últimas amenazas y medidas de ciberseguridad, invertir en programas antivirus y firewalls.
Algunas de las amenazas utilizadas por los ciberdelincuentes incluyen el ransomware y el hacktivismo, que han evolucionado y se han adaptado para atacar a organizaciones en todo el mundo.
Además, sugiere a las instituciones educativas supervisar y analizar los sistemas para detectar actividades inusuales, y ofrecer formación en ciberseguridad tanto a estudiantes como al personal.
Para los estudiantes, se aconseja cuidar la privacidad durante las clases en línea, cubriendo las cámaras web y bloqueando los micrófonos cuando no estén en uso, así como ser cautelosos al hacer clic en enlaces y evitar compartir información personal en línea.
Los padres también desempeñan un papel importante al educar a sus hijos sobre las amenazas en línea y configurar funciones de control parental para garantizar un entorno seguro.
En última instancia, se destaca la importancia de la ciberseguridad en la educación y la prevención proactiva de ciberataques.