La NASA logra un aterrizaje preciso en Utah y asegura la valiosa muestra cósmica
Santo Domingo.- En un emocionante logro para la exploración espacial, la cápsula de muestra OSIRIS-REx de la NASA, que transporta una muestra del asteroide Bennu, ha aterrizado con precisión en el campo de entrenamiento y pruebas de Utah del Departamento de Defensa. A las 10:52 am EDT (8:52 am MDT), la cápsula tocó tierra, marcando el culmen de una misión de recolección de muestras que ha capturado la imaginación del mundo.
Los datos de radar del campo de entrenamiento y pruebas de Utah confirmaron que la cápsula entró en la atmósfera de la Tierra según lo previsto a las 10:42 am EDT (8:42 am MDT), frente a la costa de California. El proceso de aterrizaje fue meticulosamente calculado y ejecutado, con el paracaídas desplegándose para garantizar la estabilidad de la cápsula antes de separarse. Finalmente, el paracaídas principal se desplegó a las 10:47 am EDT (8:47 am MDT), reduciendo la velocidad de la cápsula desde una velocidad hipersónica a aproximadamente 11 mph cuando tocó el suelo.
El emocionante momento no terminó con el aterrizaje, ya que un helicóptero transportó la cápsula de muestra a una sala limpia. El equipo de la NASA completó un proceso de recuperación minucioso, asegurando la muestra de 100 libras en una base de metal y protegiéndola con capas de teflón y una lona. Luego, el helicóptero de larga línea transportará la cápsula a una sala limpia temporal en la base, donde será desmontada y empaquetada en piezas para su transporte el próximo lunes al Centro Espacial Johnson de la NASA en Houston, su sede permanente.
En el lugar de aterrizaje de la cápsula, un equipo de científicos de la NASA y la Universidad de Arizona, junto con un especialista en seguridad militar y un piloto de helicóptero, permanecen atentos. Su tarea incluye la recolección de muestras de suelo y aire del área circundante para catalogar cualquier elemento al que la cápsula pudiera haber estado expuesta. Este análisis es crucial, ya que se busca preservar la pureza de la muestra cósmica y garantizar que cualquier contaminante ambiental sea debidamente considerado al estudiar la composición química del polvo de Bennu.
El objetivo de esta misión trascendental es buscar moléculas que puedan haber sido cruciales para el origen de la vida en la Tierra, y posiblemente en otras partes del sistema solar. Dado que muchos de estos compuestos son comunes en nuestro propio planeta, la protección de la muestra de contaminación ambiental es fundamental para asegurar que los científicos puedan distinguir con precisión entre las moléculas terrestres y las del espacio, lo que potencialmente podría arrojar luz sobre los misterios de nuestro origen cósmico.