Avanzan cerca de 3,7 días por década en el hemisferio norte y 3,2 días por década en el hemisferio sur, según Estudio
Un reciente estudio publicado en la revista Nature revela que los ciclones tropicales intensos están comenzando más temprano cada década desde la década de 1980, lo que plantea preocupaciones adicionales sobre los impactos del cambio climático en estos eventos devastadores.
Los ciclones tropicales intensos se caracterizan por vientos máximos sostenidos superiores a 110 nudos (203,7 km por hora) y son conocidos por ser uno de los desastres naturales más destructivos. Aunque se han estudiado ampliamente las características de estos ciclones, como su intensidad y duración, se sabe relativamente poco sobre los cambios en su ciclo estacional,. Recoge Europa Press.
Para investigar estos cambios, un equipo de científicos liderado por Xiping Yu analizó datos satelitales recopilados desde 1981 hasta 2017. Sus hallazgos indican que estos ciclones tienden a comenzar su temporada más temprano, avanzando aproximadamente 3,7 días por década en el hemisferio norte y 3,2 días por década en el hemisferio sur.
Lo más sorprendente es que esta tendencia se observa solo en los ciclones tropicales intensos y no en los menos severos.
Lo más sorprendente es que esta tendencia se observa solo en los ciclones tropicales intensos y no en los menos severos. Los investigadores atribuyen este adelanto estacional al calentamiento de los océanos, que a su vez está impulsado principalmente por las emisiones de gases de efecto invernadero.
Los datos también revelan que el inicio temprano de los ciclones tropicales intensos se correlaciona con un aumento en la temperatura de la superficie del mar y en el contenido de calor del océano. Estos cambios, causados en gran parte por las emisiones humanas, contribuyen a que estos fenómenos climáticos extremos se produzcan antes en la temporada.
Los datos también revelan que el inicio temprano de los ciclones tropicales intensos se correlaciona con un aumento en la temperatura de la superficie del mar y en el contenido de calor del océano.
El estudio también examinó las implicaciones de este adelanto en la aparición de ciclones tropicales intensos para regiones particularmente vulnerables, como el sur de China y el Golfo de México. Los resultados mostraron que este cambio estacional se asocia con un aumento significativo en las precipitaciones extremas y en la cantidad de eventos de lluvia persistente en estas áreas.
Si bien este estudio arroja luz sobre un aspecto menos conocido de los ciclones tropicales intensos, subraya la necesidad de investigaciones adicionales y la importancia de desarrollar estrategias de mitigación y preparación que protejan a las comunidades en riesgo frente a la llegada temprana de estos fenómenos climáticos cada vez más frecuentes. El cambio climático sigue siendo un desafío apremiante que requiere acciones globales coordinadas.
