La situación se agrava con los combatientes de la resistencia refugiándose en casas de colonos en Gaza.
Las Brigadas Al-Qassam, la fuerza militar vinculada al movimiento Hamás, hizo público hoy el operativo que sacudió la región, bautizado como "Inundación de Al-Aqsa". En un comunicado, informaron que bajo una intensa cobertura de misiles, lograron cruzar las líneas enemigas y llevar a cabo ataques simultáneos en más de 50 ubicaciones estratégicas. Esto culminó con la caída del escuadrón de defensa en Gaza y la región sur de Israel.
El conflicto ha cobrado un alto precio humano, con aproximadamente 200 palestinos y 100 israelíes fallecidos, además de más de 1.600 heridos palestinos y unos 1.000 israelíes heridos. El Ministerio de Salud de Gaza reporta numerosos casos críticos y graves entre los heridos.
Los enfrentamientos continúan en curso en varios lugares, incluyendo la base "Ra’im" y el cuartel general de la División de Gaza. Aviones israelíes han bombardeado Gaza, mientras que la resistencia palestina ha atacado asentamientos circundantes. Tel Aviv, Jerusalén y otras ciudades israelíes también sufrieron intensos ataques.
La situación se agrava con los combatientes de la resistencia refugiándose en casas de colonos en Gaza, manteniendo rehenes. Además, las Brigadas Al-Qassam han difundido imágenes de prisioneros israelíes, profundizando la tensión en la región.
El conflicto persiste, dejando a la comunidad internacional en estado de alerta mientras se busca una solución que ponga fin a la escalada de violencia en Oriente Medio.