El actual es el segundo fracaso del Consejo de Seguridad al intentar arbitrar la crisis.
Por Corresponsal de IPS
NACIONES UNIDAS – Estados Unidos vetó este miércoles 18 una resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, propuesta por Brasil, que habría pedido "pausas humanitarias" para entregar ayuda vital a millones de personas en la Franja de Gaza, bloqueada y bajo el bombardeo de las fuerzas armadas de Israel.
La embajadora estadounidense Linda Thomas-Greenfield explicó el veto de su país en el Consejo, que se ocupa de los temas de paz y seguridad internacionales en la organización mundial, diciendo que "esta resolución no menciona el derecho de Israel a la autodefensa".
"Israel tiene la visión inherente de la autodefensa como se refleja en el Artículo 51 de la Carta de la ONU \", añadió Thomas-Greenfield, sostuvo que ese derecho los reafirmó el Consejo en resoluciones anteriores sobre ataques terroristas, y "esta resolución debería haber hecho lo mismo".
Un voto "no" de cualquiera de los cinco miembros permanentes del Consejo (China, Estados Unidos, Francia, Reino Unido y Rusia), bloquea la acción sobre cualquier medida que se le presente.
Antes de la votación, el Consejo rechazó dos enmiendas propuestas por Rusia, que pedían un alto el fuego inmediato, duradero y total, y detener los ataques contra civiles.
El embajador ruso Vassily Nebenzia dijo que "el tiempo de las metáforas diplomáticas ya pasó", y subrayó que el borrador brasileño "no incluye un llamado claro a un alto el fuego y no ayudará a detener el derramamiento de sangre".
La embajadora del Reino Unido, Barbara Woodward, dijo que su país se abstuvo de la resolución porque el texto necesitaba ser más claro sobre el derecho inherente de Israel a la autodefensa y porque ignoraba el hecho de que el grupo extremista Hamás, que controla Gaza, "está utilizando a civiles palestinos como escudos humanos".
El actual es el segundo fracaso del Consejo de Seguridad al intentar arbitrar la crisis, después de que el lunes 16 se rechazó un proyecto de resolución presentado por Rusia para tratar de atajar la violenta confrontación en curso en el Medio Oriente.
La propuesta rusa que se presentó el lunes no condenaba explícitamente a Hamás y recibió cinco votos a favor (China, Emiratos Árabes Unidos, Gabón, Mozambique y Rusia) y cuatro en contra (Estados Unidos, Francia, Japón y Reino Unido), con seis abstenciones (Albania, Brasil, Ecuador, Ghana, Malta y Suiza).
La actual crisis despuntó el 7 de octubre cuando milicianos del palestino Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) incursionaron desde la Franja de Gaza en el sur de Israel, dieron muerte a centenares de civiles y militares, y tomaron como rehenes a casi dos centenares de personas israelíes y de otras nacionalidades.
Israel ha respondido desde entonces con bombardeos sobre la Franja (un espacio de 365 kilómetros cuadrados con 2,3 millones de habitantes), la ha sitiado y bloqueado el suministro de agua, alimentos, electricidad y combustible, y alistó a su ejército en preparación de una invasión y operación a gran escala contra Hamás.
Las víctimas mortales hasta ahora son cerca de 1500 del lado israelí y 3500 del lado palestino, más miles de heridos y centenares de miles de palestinos que se han desplazado penosa y desordenadamente desde el norte hacia el sur de la Franja.
La situación humanitaria en la Franja es cada vez más desesperada, en primer lugar por sus hospitales al borde del colapso. Por añadidura, un misil estalló el martes 17 a las puertas del hospital Al Ahli en la ciudad de Gaza y murieron centenares de personas en el acto.
Mientras los medios palestinos acusan directamente a Israel, el ministerio israelí de Defensa atribuyó la explosión en el hospital a un cohete mal dirigido que habría lanzado otra milicia presente en Gaza, la Yijad Islámica.
Desde Pekín, donde asiste al económico Foro de las Nuevas Rutas de la Seda, el secretario general de la ONU, António Guterres, pidió "un alto el fuego humanitario inmediato para aliviar el épico sufrimiento humano" en Gaza e Israel.
Sostuvo que un alto el fuego "proporcionaría tiempo y espacio suficientes" para sus dos llamados principales: a Hamás, para la liberación inmediata e incondicional de los rehenes retenidos en Gaza, y a Israel para que permita de inmediato la entrada de ayuda en un enclave sumido en una devastadora crisis humanitaria.
Entretanto, el presidente estadounidense Joe Biden llegó a Israel para expresar apoyo político y militar a esa nación, y también ha pedido que se permita la entrada a Gaza de camiones con ayuda humanitaria desde el vecino Egipto.
Esa propuesta preveía tratarla Biden en la capital de Jordania con varios gobernantes árabes, pero esa segunda jornada de reuniones se canceló debido a la catástrofe humana de Al Ahli, que ha esparcido una ola de indignación en el mundo árabe y musulmán.
"La región está al borde del precipicio", advirtió Guterres.