Destacan que las causas del fenómeno migratorio son de origen político, económico, social y relacionadas con los efectos negativos del cambio climático.
Palenque, México, 23 de octubre – La cumbre migratoria regional celebrada este domingo en Palenque, México, reunió a líderes de doce países latinoamericanos y concluyó con la firma de una declaración final. En el documento, las partes acordaron poner en marcha un plan de acción común para abordar las causas "estructurales" de la migración.
Destacando que las causas fundamentales del fenómeno migratorio son de origen político, económico, social y relacionadas con los efectos negativos del cambio climático, los líderes de Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, México, Panamá, Venezuela y Belice acordaron trabajar en conjunto para enfrentar estos desafíos.
El plan de acción priorizará la autosuficiencia alimentaria, la protección medioambiental, la seguridad energética (con énfasis en la descarbonización), la inversión, el comercio, el empleo y la lucha contra el crimen organizado. México ofreció cooperación técnica a través de programas como 'Sembrando Vida' y 'Jóvenes Construyendo el Futuro', así como en áreas de gas y energías renovables.
Un punto clave en la declaración es el llamado a levantar las medidas coercitivas "unilaterales" impuestas contra algunas naciones de la región, como sanciones, bloqueos o listados de terrorismo. Los líderes recalcaron que estas acciones son "contrarias al derecho internacional" y tienen repercusiones graves más allá de los países afectados. despliega Actualidad.rt
La declaración también destaca el compromiso de respaldar a Haití, afectada por acciones delictivas de pandillas, para restablecer un entorno de seguridad humana y normalizar la situación económica y social.
En el ámbito de los derechos humanos y la migración, la cumbre instó a los países de origen, tránsito y destino a priorizar políticas que respeten "el derecho humano a migrar". Esto incluye la promoción de opciones de regularización permanente, y la creación de vías migratorias "regulares, ordenadas y seguras" por parte de los Estados de destino.
La declaración también destaca el compromiso de respaldar a Haití, afectada por acciones delictivas de pandillas, para restablecer un entorno de seguridad humana y normalizar la situación económica y social.
En términos de deuda soberana, la propuesta es replantear la arquitectura financiera internacional para garantizar que los países de ingreso medio cierren brechas sociales y reduzcan la intención de migrar. Esto incluiría cambiar la deuda universal por autosuficiencia alimentaria, servicios ambientales y acción climática.
Además, se prometió aumentar la coordinación con entes internacionales, profundizar las relaciones Sur-Sur, mantener un diálogo franco a través de un grupo de trabajo y vincular los resultados con el encuentro de alto nivel sobre migración y desarrollo propuesto por Colombia y México para el primer trimestre de 2024.