80 colaboradores siembran 2,500 árboles en una jornada de reforestación en San José de las Matas.
El Batey del Cebú, San José de las Matas. – En un gesto inspirador de compromiso ambiental, los colaboradores voluntarios del Banco Popular Dominicano llevaron a cabo una heroica jornada de reforestación el pasado viernes 27 de octubre. Su misión: fortalecer la cobertura forestal, proteger cuencas hidrográficas y luchar contra el cambio climático.
Ubicados en la apacible comunidad de El Batey del Cebú, en San José de las Matas, provincia de Santiago, este incansable equipo del Voluntariado Popular plantó un total de 2,500 árboles en una impresionante extensión de 67 tareas.
Pero esto es solo el comienzo de una transformación ecológica. Después de la siembra, el equipo de expertos del Plan Sierra se encargará de asegurar que estas jóvenes plantas arraiguen y florezcan como majestuosos árboles.
A medida que maduren, estos árboles desempeñarán un papel crucial en la recuperación de la cobertura forestal de La Sierra. No solo capturarán 800 toneladas de dióxido de carbono, sino que también retendrán 300,000 kilogramos de suelo y almacenarán 7.5 millones de litros de agua anualmente.
Dinorah Grullón, Gerente de la División de Proyectos y líder del Voluntariado Popular, destacó la importancia de este esfuerzo en su discurso motivador antes del inicio de la siembra. A lo largo de más de 20 años, miles de colaboradores voluntarios del Banco Popular han plantado más de un millón de árboles en diversas regiones del país.
Junto a la señora Grullón, personalidades como Inmaculada Adames, vicepresidenta ejecutiva de Plan Sierra; Mariel Bera, vicepresidenta del Área de Relaciones Corporativas y Banca Responsable del Popular; Elías Dinzey, gerente general de la Fundación Popular; y Roque Antonio Ureña, propietario de los terrenos, lideraron esta impactante iniciativa.
Estas jornadas de reforestación reflejan el firme compromiso del Banco Popular con el desarrollo sostenible de la nación, en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y los Principios de Banca Responsable de las Naciones Unidas. En conjunto, catalizan el progreso social y medioambiental de la República Dominicana.