Dicen que ACOFAVE busca desestabilizar y reducir la comercialización de automóviles usados.
Santo Domingo, 8 de noviembre de 2023.-Diversas asociaciones de importadores de vehículos usados, incluyendo ASOCIVU, ANADIVE y ADECI, han respondido a las recientes declaraciones de la Asociación de Concesionarios y Fabricantes de Vehículos (ACOFAVE), considerándolas sin fundamentos y distorsionando la realidad del mercado automotriz de la República Dominicana.
Acofave había llamado este martes a las autoridades a imponer la regulación, legalidad y el debido orden en el sector vehicular y de transporte, con el fin de asegurar la captación de los ingresos fiscales y evitar irregularidades.
Reiteró sus deseos de luchar por un parque vehicular adecuado a los tiempos, ofreciendo vehículos de alta calidad, tecnología avanzada y respetuosos con el medio ambiente.
Acofave, dijo que es importante que la nación cuente con un parque vehicular saneado, con control de emisiones de gases, implementando la inspección técnica vehicular, control vehículos de carga, se reduzca la obsolescencia de los vehículos en el parque; lo que también haría bajar las fatalidades por accidentes y mejoraría la salud de los dominicanos.
Ante esas declaraciones de Acofave, los importadores de vehículos usados reiteran que las declaraciones de los concesionarios buscan inducir a confusión y constituyen una forma de competencia desleal.
Señalan que estas declaraciones buscan desestabilizar y reducir la comercialización de automóviles usados.
Estas asociaciones, que representan a más de 1,200 empresas dedicadas a la importación y comercialización de vehículos usados, destacan que este subsector económico ha sido uno de los más dinámicos en la economía dominicana en los últimos años.
Indican que sus actividades contribuyen significativamente a través del pago de impuestos aduanales y contribuciones fiscales a impuestos internos, aportando cerca del 65% de los ingresos fiscales por concepto de vehículos.
Los importadores de vehículos usados reiteran que las declaraciones de los concesionarios buscan inducir a confusión y constituyen una forma de competencia desleal.
Enfatizan que las ventas de unidades usadas en condiciones de semi nuevos (5 años de fabricación) representan una opción crucial para la población de menores ingresos, siendo el 80% de los automóviles que ingresan al país con fines comerciales. Estas contribuyen a mejorar el parque vehicular y el transporte en general.
Para clarificar las afirmaciones realizadas por ACOFAVE, las asociaciones emiten las siguientes aclaraciones:
Vehículos con Timón a la Derecha: Se importan desde hace más de 25 años sin evidencia de vinculación con accidentes, peligrosidad o problemas de seguridad.
Preferencia del Consumidor: El 14.34% de los vehículos japoneses con el guía modificado durante el período 2014-2022 responde a la preferencia del consumidor por la calidad en su fabricación.
Nivel de Satisfacción del Consumidor: Los vehículos de origen japonés destacan por su consistencia, eficacia y corta depreciación, siendo preferidos por la clase media y media-baja.
Vehículos Salvamento: Prohibidos desde 2002 según el decreto núm. 671-02, aplicado rigurosamente por la DGA.
Informalidad: Las asociaciones solicitan mayor control sobre los dealers informales, quienes constituyen competencia desleal al no cumplir con contribuciones fiscales.
Lavado de Dinero: Las asociaciones apoyan la aplicación de la Ley 155-17 para prevenir el lavado de activos en el sector.
Servicio y Garantía de Calidad: Los vehículos usados cuentan con garantías según la Ley 63-17 y la 358-05. La disponibilidad de repuestos es adecuada, a diferencia de los vehículos nuevos.
Subvaluación de Unidades Usadas: Los valores de referencia para el pago de impuestos parten de los presentados por los concesionarios de vehículos nuevos, careciendo de rigor técnico catalogarlos como competencia desleal.
Competencia Desleal: En el pasado, las denuncias similares fueron declaradas inadmisibles por Pro-Competencia, y las aseveraciones actuales no están relacionadas con competencia desleal ni buenas prácticas comerciales.