Su enorme interés por las damas, y dentro de éstas, por las de temprana edad, fue siempre un signo en su vida.
La predilección por la buena vida, sobre toda aquella que se daba en el Hollywood de los cuarenta, y más aún en el exclusivo ambiente de las grandes estrellas del momento, era muy atractivo a todo público, pero de manera especial a gente con poder y dinero de la Sociedad Norteamericana y del mundo. Nóveles o artistas establecidos y todo tipo de empresarios, querían pertenecer a ese círculo dorado y glamoroso del mundo del espectáculo.
Según cronistas de espectáculos e historiadores de la época, la atmosfera respirada allí era extraordinariamente especial. Definitivamente, lo más lujoso y confortable a que podía aspirar un ser humano potentado e n esos tiempos. Charlie Chaplin era uno de ellos. De su nivel habían otros pero muy pocos. Los reflectores estaban dirigidos hacia él y todo lo que en torno a él se moviera o desarrollara. Era la estrella, el personaje más famoso entre los artistas del momento. Todos querían conocerlo y tratarlo.
Su enorme interés por las damas, y dentro de éstas, por las de temprana edad, fue siempre un signo en su vida. Pero dentro de esa intención de carácter enteramente sensual, existía un hombre que buscaba la formación familiar en su existencia. En ese interecno de bohemía desenfrenada, se forjó el hombre que desea los hijos y el matrimonio. Se casa en tres ocasiones antes de encontrar el amor de su vida y concluye con una cuarta boda ese ciclo tan bullicioso en su carrera profesional.
¿Oona entendió al genio, o el genio entendió a su última esposa?
Aparentemente, aún a su corta edad, ella lo entendió a él, pues él externa de Oona y su relación sentimental lo siguiente y cito:
“Oona era la encarnación de una esposa ideal. Tuve mucha suerte con ella. Estaba muy feliz. Finalmente, tenía a mi lado a una verdadera esposa, no una mujer que quería hacer la carrera.
La estrella del cine mundial sigue contando dentro de la crónica citada en Wikipedia lo siguiente y cito”:
Es cierto, estaba seguro de que Oona podría convertirse en una gran actriz cómica, con un excelente y sutil sentido del humor, pero no quería compartirla con nadie”.
Concluye la nota.
Tan extraordinario fue su amor por ella que escribe una emblemática canción para que permaneciera como ejemplo tangible de ello ante la posteridad. En Candilejas, Chaplin dice quién es él, y quién es ella en la misma ante el destino.
Veamos las tres (3) primeras estrofas, de un total de cuatro (4) que componen la canción:
Primera Estrofa
Tú, llegaste a mí,
Cuando me voy
Eres luz de abril,
Yo tarde gris,
Segunda Estrofa
Eres juventud, amor,
Color, fulgor de sol,
Trajiste a mí, tu juventud,
Cuando me voy,
Tercera Estrofa
Entre candilejas, te adoré,
Entre candilejas, yo te amé
Esas son las primeras tres estrofas de la canción “candilejas” de la película del mismo título, realizada por el mundialmente famoso actor, director y productor cinematográfico Charlie Chaplin, nacido en Londres el 16 de abril de 1889.
La película y la canción, cuya partitura musical fue la banda sonora, se estrenaron en 1952. La pieza musical, compuesta por el mismo Chaplin está considerada entre las mejores partituras de la historia del cine. Los arreglos musicales corresponden a Ray Rasch y Larry Russell.
Oona O´neill Chaplin nace el 14 de mayo de 1925, de modo que cuando decide casarse con el genio del cine, tenía 17 años. La edad de Charlie Chaplin era de 54 años. Entre ambos había una diferencia de 36 años.
Independientemente de lo que pensó la sociedad norteamericana sobre la anunciada unión matrimonial de Oona y Chaplin en 1943, ellos decidieron llevarla a cabo.
Los medios de circulación diaria y las revistas no dejaban de incluir diversas reseñas en sus ediciones sobre el fatal desenlace que esa unión iba a experimentar en un período relativamente corto de tiempo. Ese adelantado criterio se debía a la escandalosa vida social y hombre de mundo que rodeaba a Charlie Chaplin como parte de los círculos de la farándula artística y social de Hollywood en esos años.
Se agregaba a ese nuevo tórrido romance la juventud de la dama y su ascendencia familiar, pues era hija muy preciada del reconocido escritor, dramaturgo de origen norteamericano Eugene O´neill, quien ostentaba, producto de su extraordinaria capacidad intelectual, un Premio Nobel y un premio pulitzer. Su madre era la escritora Agnes Bolton. Independientemente de la condición social y económica de sus padres, más la demostrada capacidad intelectual de los mismos, Oona quedó perdidamente enamorada de Charlie Chaplin en el mismo instante en que lo trató de manera personal. Igual efecto dijo Chaplin que sintió sobre ella al citarse a conversar sobre la posibilidad de que pudiera interpretar un rol en su próxima película. A partir de ese momento ambos fueron inseparables hasta el día en que la muerte sorprendió a Chaplin mientras dormía en su casa, a la edad de 88 años, el 25 de diciembre de 1977 en Suiza.
Según dicen las reseñas periodísticas de la época y las reproducciones de internet de estos tiempos, el padre de Oona hizo todos los esfuerzos o su alcance para impedir la boda, pero toda acción resultó frustrada, pues ambos habían decidido amarse para siempre, aun mediando entre ambos una diferencia de 36 años de edad.
Además de la constante propensión del extraordinario artista a la vida bohemia y relaciones furtivas con chicas jóvenes, se sumada a su dinámico currículo social tres matrimonios fallidos. En esas relaciones tuvo sus primeros dos hijos, Charles Junior que nació el 28 de junio de 1925; y en 1926 nació su segundo de nombre Sydney. Ambos los concibió con la actriz Lita Mac Murray. Con el amor de su vida, Oona O´neill procreó ocho (8) hijos.
Aquel romance entre dos personas de etapas diferentes de vida posee grandes matices, muy parecidos a los contrastes de los integrantes de la Generación Dual. Chaplin, nacido en 1889 en Londres, Inglaterra, pertenece a la Generación Dual del siglo diez y nueve, Oona, al nacer en 1925 en Estados Unidos de Norteamérica, pertenece a la Generación Dual del siglo XX.
Aun con la señalada diferencia de edad entre la pareja, ésta logra alcanzar desde un primer momento, un entendimiento eminentemente horizontal, sincero, amoroso, y fluido.
Lo extraordinariamente valioso de esta historia es la confesión que ambos se hacen al iniciar su convivencia sentimental, pues están sumamente conscientes de que la vida que han decidido llevar a cabo, posiblemente cuente con una despedida terrenal antes de lo previsto, dada la edad biológica de Chaplin en comparación con la de ella. Aun empezando a vivir saben que tendrán una despedida triste y dolorosa, por lo que deciden aprovechar el tiempo amándose de manera sutil y profunda.
La propuesta de amor entre ambos discurrió de la siguiente manera: de Chaplin a Oona comprendió el siguiente diálogo: “Cásate conmigo para enseñarte a vivir y enseñarme a morir”… En cambio ella le respondió: “No Charlie, me casaré contigo para que me enseñes a madurar, y te enseñaré a ser joven hasta el final”.
Definitivamente la pareja cumplió sus palabras al iniciar la relación, pues Oona lo acompañó a todas partes donde fuere necesario, aun cuando Charlie sólo podía trasladarse en silla de ruedas. La juventud, la bondad y la fortaleza de ella se hicieron presentes cuando él las necesitó para seguir haciendo vida pública o familiar. Del mismo modo, él transmitió a ella toda su experiencia de vida, para que enfrentara el mundo con ocho (8) hijos bajo su responsabilidad y la auscultación crítica de la sociedad y los medios de comunicación cuando el dejara de existir. Pero el legado de vida más extraordinario que transfirió Chaplin a su eterno amor, fue la manera en que debía manejar la nostalgia de los años vividos, cuando él haya partido e n primer lugar, producto de su edad biológica.
Por eso, teniendo muy claro el final de la relación que iniciaban, escribió dos estrofas claves de su canción candilejas, la No.1 y la No.2, literalmente estas comprenden la confesión entre ambos y cito:
“Tú, llegaste a mi cuando me voy, eres luz de abril, yo tarde gris”
La segunda relata de la siguiente forma y cito:
“Eres juventud, amor, calor, fulgor de sol, trajiste a mí, tu juventud cuando me voy”
Termina la cita.
Pero el genio de Londres, Inglaterra, no sólo dejó su impronta creativa al círculo cinematográfico, sus hijos, y su queridísima esposa. Fue lo suficientemente explícito cuando utilizó el medio y arte que fue su vida, para decirle al mundo y a todos los integrantes del poder político y económico, cuan preocupado estaba por el futuro de la humanidad.
Con su película de 1940, “El Gran Dictador”, indudablemente Chaplin hace de la comicidad, un documento de extraordinario valor político y profunda reflexión sobre el mundo y el giro nocivo que unos cuantos le estaban dando a la convivencia civilizada de los pueblos.
El discurso con que Chaplin finaliza la película, independientemente de que con la misma enfrenta de manera directa las decididas pretensiones de Adolfo Hitler por dominar el mundo, es un llamado certero a la conciencia de cada hombre de bien, para que hicieran del universo un espacio habitable y de paz.
Veamos algunos segmentos del discurso incluido como epílogo en la película, cuya escritura corresponde al año 1940, y cito:
Discurso final de la película "El gran dictador", de Charlie Chaplin, 1940
"Lo siento.
Pero… yo no quiero ser emperador. Ese no es mi oficio, sino ayudar a todos si fuera posible. Blancos o negros. Judíos o gentiles. Tenemos que ayudarnos los unos a los otros; los seres humanos somos así. Queremos hacer felices a los demás, no hacernos desgraciados. No queremos odiar ni despreciar a nadie. En este mundo hay sitio para todos y la buena tierra es rica y puede alimentar a todos los seres. El camino de la vida puede ser libre y hermoso, pero lo hemos perdido. La codicia ha envenenado las armas, ha levantado barreras de odio, nos ha empujado hacia las miserias y las matanzas.
Esa intervención frente a cámara, continúa de la siguiente forma:
Hemos progresado muy deprisa, pero nos hemos encarcelado a nosotros mismos. El maquinismo, que crea abundancia, nos deja en la necesidad. Nuestro conocimiento nos ha hecho cínicos. Nuestra inteligencia, duros y secos. Pensamos demasiado, sentimos muy poco.
Sus palabras cobran alto sentido poético cuando externa:
Más que máquinas necesitamos más humanidad. Más que inteligencia, tener bondad y dulzura.
Sin estas cualidades la vida será violenta, se perderá todo. Los aviones y la radio nos hacen sentirnos más cercanos. La verdadera naturaleza de estos inventos exige bondad humana, exige la hermandad universal que nos una a todos nosotros.
Hace un vehemente llamado a la sociedad mundial cuando expresa:
Ahora mismo, mi voz llega a millones de seres en todo el mundo, millones de hombres desesperados, mujeres y niños, víctimas de un sistema que hace torturar a los hombres y encarcelar a gentes inocentes. A los que puedan oírme, les digo: no desesperéis. La desdicha que padecemos no es más que la pasajera codicia y la amargura de hombres que temen seguir el camino del progreso humano.
Es incisivo cuando habla de la libertad:
El odio pasará y caerán los dictadores, y el poder que se le quitó al pueblo se le reintegrará al pueblo, y, así, mientras el Hombre exista, la libertad no perecerá.
Soldados:
No os entreguéis a ésos que en realidad os desprecian, os esclavizan, reglamentan vuestras vidas y os dicen qué tenéis que hacer, qué decir y qué sentir.
Os barren el cerebro, os ceban, os tratan como a ganado y como carne de cañón. No os entreguéis a estos individuos inhumanos, hombres máquina, con cerebros y corazones de máquina.
Vosotros no sois ganado, no sois máquinas, sois Hombres. Lleváis el amor de la Humanidad en vuestros corazones, no el odio. Sólo los que no aman odian, los que nos aman y los inhumanos.
Soldados:
Aprovecha ese momento cumbre de su obra cinematográfica para dirigirse a los soldados y el rol que deben jugar en ese momento tan trágico para la humanidad y cito:
No luchéis por la esclavitud, sino por la libertad. En el capítulo 17 de San Lucas se lee: "El Reino de Dios no está en un hombre, ni en un grupo de hombres, sino en todos los hombres…" Vosotros los hombres tenéis el poder. El poder de crear máquinas, el poder de crear felicidad, el poder de hacer esta vida libre y hermosa y convertirla en una maravillosa aventura.
La democracia, su gran preocupación, es el epílogo dentro del epílogo discursivo y dice:
En nombre de la democracia, utilicemos ese poder actuando todos unidos. Luchemos por un mundo nuevo, digno y noble que garantice a los hombres un trabajo, a la juventud un futuro y a la vejez seguridad. Pero bajo la promesa de esas cosas, las fieras subieron al poder. Pero mintieron; nunca han cumplido sus promesas ni nunca las cumplirán. Los dictadores son libres sólo ellos, pero esclavizan al pueblo. Luchemos ahora para hacer realidad lo prometido. Todos a luchar para liberar al mundo. Para derribar barreras nacionales, para eliminar la ambición, el odio y la intolerancia.
Luchemos por el mundo de la razón.
Un mundo donde la ciencia, el progreso, nos conduzca a todos a la felicidad.
Soldados:
En nombre de la democracia, debemos unirnos todos."
Como pueden apreciar en su dramática intervención, no se trata de una comedia más del genio. Chaplin utiliza al cine, su figura y su influencia mundial para decirle a su generación que asuma su responsabilidad ante los tiempos hostiles que se avecinan. Pero advierte además, a la generación más joven, generación a la que invariablemente pertenece su más reciente esposa, que miren al mundo y el comportamiento de ciertos seres humanos con ojos críticos. Con marcado interés de transmitir sus vivencias y conocimientos a los próximos habitantes del mundo, Chaplin adopta una actitud cardinal sobre hechos y decisiones políticas que demostraban los intereses de unos cuantos en contra del bienestar de las grandes concentraciones poblacionales.
Ante esa decidida posición, abiertamente política contra el estatus Quo hegemónico, planteada por la máxima figura del espectáculo mundial en esos tiempos, considero que resulta prudente establecer una serie de inquietudes en torno al papel que las figuras emblemáticas de la Generación Dual 2020-2021, deben asumir para garantizar la subsistencia en paz de los integrantes de la Generación Dual del siglo XXI.
RELACIÓN DE INQUIETUDES:
1) ¿Asumirán Elon Musk, Carlos Slim y Barack Obama un llamado parecido en estos tiempos?
2) ¿Tendrán Marck Zukerburg, Bill Gates y Stven Spielberg, el coraje para decirles públicamente a los líderes de las grandes potencias en disputa política y económica, que hay formas diplomáticas para evitar las guerras?
3) ¿Expondrán su bien ganado prestigio y sus abultadas fortunas económicas Belinda Gate, Ángela Merkel, Condelessa Rice, Hilary Clinton y Klaus Martin Schwab, por el rediseño de un mundo que garantice una mejor condición de vida a sus habitantes?
4) ¿Se podrán sentar en la mesa de las negociaciones lo antes posible los líderes Xi Jimping, Joe Biden y Vladimir Putin para posponer las confrontaciones bélicas que en ningún sentido favorecen el desarrollo de la humanidad?
5) ¿Bill Clinton, Jeff Bezos, Warren Buffet, George Lucas, Michael Jordan y Robert Redford, imitarán el ejemplo de Charlie Chaplin ante sus congéneres y la generación siguiente?
En su condición de miembros sumamente destacados y reconocidos de la Generación Dual, cualquiera de ellos, o una buena parte de los hombres y mujeres señalados, miembros de la Generación Dual del siglo XX y del siglo XXI, podrían hacer lo que hizo Chaplin en 1940. En esta oportunidad resulta es más fácil, pues cuentan con mayor apertura política. Además, su incidencia mediática es instantánea y planetaria, sin las barreras idiomáticas de aquellos tiempos.
La realidad está demandando una postura firme y decidida de personas con alto poder de incidencia política y económica. Indudablemente, los personajes señalados la poseen y saben que deben actuar para evitar males peores. Dar la espalda a los hechos como ocurrió con la Alemania Nazi de 1939, es infringir al universo otra estocada mortal en el corazón mismo de su desarrollo colectivo.
Como podemos advertir, luego de la película “El Gran Dictador”, Chaplin se convierte en un artista comprometido con las causas sociales de su tiempo. Con o sin la expresa intención de hacerlo, su actitud es una apuesta por la vida, por la vida sana y cordial que él prometió a Oona hasta el final de su existencia. Tenía muy claro que sobre el mundo se cernían decisiones catastróficas, y en ese mundo residirían su esposa y sus hijos. Como se advierte en ese texto discursivo de “El Gran Dictador, Chaplin transmite y devuelve a Oona una parte significativa de su compromiso amoroso, cuando le expresó: “Cásate conmigo para enseñarte a vivir, y enseñarme a morir”.En ese instante habla la voz de la experiencia, y el genio habló con conocimiento de causa cuando escribió el discurso que finaliza la película.
Sin lugar a dudas, Chaplin se adelantó a su tiempo, como casi siempre suele ocurrir en personas de extraordinaria visión dentro de la creatividad, las ciencias y otras áreas, pues con su propuesta audiovisual no sólo denuncia a Hitler ante el mundo, sino que aprovecha el momento para denunciar la actitud desinhibida de ciertos seres humanos para con las necesidades y padecimientos de toda la humanidad.
Estaba plenamente convencido de que la voracidad material de unos cuantos conduciría hacia un mortal desfiladero las buenas intenciones de otros tras la convivencia civilizada del universo.
En esa relación amorosa tiene la Generación Dual un valioso ejemplo de la metodología que miles de mujeres y hombres deben asumir ante las adversidades planteadas por unos cuantos para someter al universo en un rotundo y diabólico caos. Ese documento audiovisual de mediados del siglo XX, se convierte hoy, cuando nos encontramos al borde de los primeros treinta (30) años del siglo XXI, en un poderoso instrumento de formación integral para la primera y segunda cohorte de habitantes del planeta durante el siglo en desarrollo.
Resulta oportuno cuestionarnos de nuevo ante un hecho tan evidente de solidaridad multigeneracional, bajo el siguiente criterio:
1. ¿Ningún artista extraordinario de la Generación Dual, recogerá los perfiles del discurso pronunciado por Charlie Chaplin en “El Gran Dictador”?
2. ¿Molestó tanto en su tiempo la posición política de Charlie Chaplin a los integrantes de los grupos hegemónicos, como para amedrentar a quien decida asumir una actitud parecida?
3. ¿Será la relación amorosa de Charlie Chaplin y Oona, el arquetipo universal para definir la vinculación sentimental entre amantes de dos épocas distintas de vida?
4. ¿Pueden verse reflejados muchos integrantes de la Generación Dual en el contexto amoroso de Oona y Chaplin?
5. ¿Quién será el Chaplin de la Generación Dual del siglo XXI?
6. ¿Será posible encontrar en la Generación Dual de ambos siglos, mujeres y hombres bajo el concepto solidario de Oona O´neill y Charlie Chaplin?