Es considerado un ejmplo de superación y liderazgo dominicano en Nueva York
Santo Domingo se vistió de gala este jueves para celebrar la quinta entrega del codiciado Premio al Emigrante Dominicano Sr. Oscar de la Renta. En esta ocasión, el homenajeado fue Quemuel Arroyo Peña, un destacado diseñador urbano y jefe de accesibilidad en la Autoridad Metropolitana de Transporte de Nueva York.
Arroyo Peña, oriundo de Bonao, ha sobresalido no solo en su ámbito profesional, sino también por su incansable labor comunitaria, una hazaña aún más admirable considerando su discapacidad física motora.
El Teatro Nacional Eduardo Brito fue el escenario perfecto para este evento este jueves que irradió cultura y orgullo dominicano. Arroyo Peña recibió, además del reconocimiento, una compensación de un millón de pesos cortesía del Banco de Reservas.
Roberto Álvarez, el canciller dominicano, destacó la relevancia de los dominicanos en el extranjero, quienes, superando obstáculos y desafíos, han alcanzado posiciones de liderazgo en sus comunidades, llevando consigo su dominicanidad y cultura a nivel mundial. Álvarez resaltó que el premio, nombrado en honor al ilustre diseñador Oscar de la Renta, es un símbolo de los valores excepcionales que personifican tanto a este icónico artista como a los emigrantes dominicanos.
La ceremonia también rindió homenaje a otros destacados dominicanos en el exterior, incluyendo a Rafael Antonio Núñez Cedeño, Iris Violeta Rijo Matos, y varios más, quienes han brillado en diversas áreas profesionales, sociales y culturales en países como Estados Unidos, Canadá, Puerto Rico e Islandia.
El evento, patrocinado por reconocidas entidades como Grupo Puntacana y Fundación Corripio, contó con la presencia de notables figuras del sector empresarial, líderes de opinión, representantes de la sociedad civil y del Cuerpo Diplomático. Este acto no solo celebró los logros de estos sobresalientes dominicanos, sino también reafirmó la política del presidente Luis Abinader de proteger y valorar a los dominicanos en el exterior, considerándolos embajadores naturales de la República Dominicana.