Retorno de embajadores: Irán y Pakistán acuerdan medidas para calmar las tensiones

Las acciones reflejan un esfuerzo conjunto por restablecer la armonía diplomática tras las tensiones por los recientes bombardeos

Lunes 22 de enero del 2024.- En un paso hacia la reducción de las tensiones bilaterales, los gobiernos de Irán y Pakistán han alcanzado un acuerdo para el retorno de sus embajadores a sus respectivos puestos. Este desarrollo sigue a una semana de escalada de tensiones, que incluyó bombardeos mutuos contra objetivos "terroristas" en ambos territorios.

El comunicado oficial , que recoge Europa Press, del Ministerio de Exteriores de Pakistán anunció: "Tras una conversación telefónica entre los ministros de Exteriores de Pakistán e Irán, se ha acordado mutuamente que los embajadores de ambos países volverán a sus respectivos puestos el 26 de enero de 2024″. 

Además, el ministro de Exteriores iraní, Hosein Amirabdolahian, realizará una visita a Islamabad el 29 de enero, invitado por su homólogo paquistaní, Jalil Abbas Jilani.

Naser Kanani, portavoz del Ministerio de Exteriores iraní, subrayó la solidez y amistad en los lazos entre ambos países, destacando el respeto mutuo a la soberanía y la integridad territorial. 

Kanani señaló la amenaza común del terrorismo y la necesidad de aplicar acuerdos bilaterales para garantizar la seguridad colectiva, haciendo hincapié en la postura de Teherán basada en relaciones amistosas con los países vecinos.

"Tras una conversación telefónica entre los ministros de Exteriores de Pakistán e Irán, se ha acordado mutuamente que los embajadores de ambos países volverán a sus respectivos puestos el 26 de enero de 2024″. 

La semana pasada, la Guardia Revolucionaria de Irán llevó a cabo ataques contra el grupo armado Jaish al-Adl en territorio paquistaní, generando tensiones que resultaron en la llamada a consultas del embajador paquistaní en Teherán.

En respuesta, Pakistán ejecutó bombardeos en territorio iraní contra grupos armados, provocando nueve muertos según Irán. 

Este acuerdo para el retorno de embajadores y la visita diplomática buscan restaurar la estabilidad en las relaciones, que se han visto afectadas por acusaciones mutuas sobre la presencia de grupos armados en la frontera durante los últimos años.