El presidente Abinader insta a evitar una crisis humanitaria y de seguridad en Haití.
Santo Domingo.- El presidente Luis Abinader se dirigió al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, marcando un hito como el primer presidente de la República Dominicana en participar en esta prestigiosa asamblea. Durante su discurso, Abinader no solo destacó la urgente necesidad de solidaridad internacional para abordar la crisis en Haití, sino que también estableció un firme compromiso de la República Dominicana para proteger su soberanía ante las crecientes amenazas de inestabilidad y desorden provenientes de su vecino.
Agradeciendo al presidente de Guyana, Irfaan Alí, por la oportunidad de hablar ante el Consejo, presidido por Guyana en este mes de febrero, Abinader articuló un mensaje claro y contundente: la comunidad internacional se enfrenta a un punto de inflexión crítico con respecto a la situación en Haití.
"O luchamos juntos para salvar a Haití o lucharemos solos para proteger a República Dominicana", declaró, subrayando la importancia de una acción colectiva frente a la amenaza común que representa el colapso de Haití.
La crisis haitiana, exacerbada por la violencia de las bandas criminales, la inseguridad alimentaria aguda, y la ausencia de una institucionalidad democrática, no solo constituye una tragedia humanitaria sino también un foco de inestabilidad para toda la región.
Abinader puso de relieve la estimación del Programa Mundial de Alimentos, que casi la mitad de la población haitiana, cerca de 5 millones de personas, sufre de inseguridad alimentaria aguda, una situación agravada por la violencia y la falta de gobernabilidad.
Desde septiembre de 2021, el gobierno dominicano ha estado alertando sobre el deterioro continuo en Haití, lamentablemente, con una respuesta internacional que hasta ahora ha sido insuficiente. Abinader criticó la lentitud y la falta de acciones concretas de la comunidad internacional, enfatizando que el tiempo de las promesas ha terminado y que es momento de actuar decisivamente.
El mandatario dominicano no solo se centró en la crisis haitiana sino que también habló sobre el cambio climático y la seguridad alimentaria, destacando su interconexión y la importancia de abordar estos temas de manera integrada, especialmente en contextos de conflicto armado. La vulnerabilidad de los pequeños Estados insulares en desarrollo ante el cambio climático fue otro de los puntos clave de su discurso, subrayando la urgencia de acciones coordinadas y responsables para mitigar sus efectos devastadores.
La disposición de Kenia, bajo el liderazgo de su presidente William Ruto, de encabezar la misión de apoyo en Haití y la voluntad de otros países de contribuir, fue resaltada por Abinader como un signo de esperanza y una posible vía hacia la estabilización de Haití. Sin embargo, el llamado más fuerte de Abinader fue hacia una mayor implicación y compromiso de la comunidad internacional para enfrentar esta crisis sin precedentes.
"República Dominicana no da a Haití lo que le sobra, sino que aporta lo que le falta", concluyó, reflejando el espíritu de solidaridad y responsabilidad compartida que debe guiar la acción internacional.
Este llamado a la acción de Abinader no solo refuerza el liderazgo de la República Dominicana en el escenario internacional, sino que también pone de manifiesto la imperiosa necesidad de una respuesta coordinada y efectiva ante las crisis humanitarias y de seguridad en la región. La comunidad internacional, ahora más que nunca, debe atender este urgente llamado para evitar un desastre humanitario en Haití y asegurar la estabilidad y seguridad