Un Estudio Revela Similitudes Genéticas en el Rombencéfalo, Pista Clave para Comprender la Evolución de los Vertebrados
Viernes, 23 de febrero de 2024.-Un reciente estudio llevado a cabo por el Instituto Stowers de Investigación Médica ha arrojado luz sobre las sorprendentes similitudes genéticas en el rombencéfalo, la región cerebral encargada de funciones vitales, entre las lampreas marinas y los seres humanos.
Estos fascinantes hallazgos, publicados en Nature Communications, liderados por el investigador Robb Krumlauf, y que recoge Europa Press, proporcionan una ventana al pasado lejano, revelando claves cruciales sobre la evolución de los cerebros de los animales antiguos.
A pesar de las notables diferencias anatómicas, como la falta de mandíbula en las lampreas marinas, se descubrió que el rombencéfalo de ambos, humanos y lampreas marinas, se construye utilizando herramientas moleculares y genéticas extraordinariamente similares.
El estudio destaca que una señal molecular crucial, conocida como ácido retinoico o vitamina A, desempeña un papel fundamental en el desarrollo del rombencéfalo en ambas especies, desafiando las percepciones previas sobre la evolución de características cerebrales en animales primitivos.
Alice Bedois, autora principal del estudio, señala que este descubrimiento sobre el rombencéfalo es esencial para comprender la evolución de la complejidad cerebral a lo largo del tiempo.
A pesar de la falta de mandíbula en las lampreas marinas, el estudio demuestra que la construcción fundamental de esta parte del cerebro sigue un patrón idéntico al de vertebrados más complejos, como ratones e incluso humanos.
El ácido retinoico, inicialmente asociado con el desarrollo en especies más avanzadas, se revela como un actor crucial también en animales primitivos como las lampreas marinas.
Este hecho sugiere que la formación del rombencéfalo con la intervención del ácido retinoico es ancestral en todos los vertebrados, brindando nuevas perspectivas sobre la conexión evolutiva entre estos seres marinos y los humanos.
En palabras de Robb Krumlauf, "Hemos demostrado que esta parte básica del cerebro está construida exactamente de la misma manera que los ratones e incluso los humanos".
El estudio plantea preguntas fascinantes sobre la evolución de los circuitos genéticos que rigen la formación del rombencéfalo y ofrece pistas valiosas que pueden conducir a una comprensión más profunda de la diversidad evolutiva en los vertebrados.