La representante de la ONU en Haití insta al despliegue de una fuerza de seguridad liderada por Kenia para combatir la violencia sin precedentes.
MADRID, 8 de marzo. Durante una sesión a puerta cerrada con el Consejo de Seguridad de la ONU, María Isabel Salvador, la representante de la Oficina Integrada de las Naciones Unidas en Haití (BINUH), ha hecho un llamado crítico para implementar medidas urgentes frente a la alarmante situación de inseguridad que asola a Haití. Salvador subrayó la importancia de movilizar sin demora la Misión de Apoyo a la Seguridad, una operación internacional no afiliada a la ONU, que estará bajo el mando de Kenia. Esta acción se considera crucial ante la escalada de violencia sin precedentes y las recientes amenazas de bandas criminales de desatar una guerra civil.
En constante comunicación con el primer ministro de Haití, Ariel Henry, quien se encontraba en una gira internacional al surgir la violencia, Salvador reporta que la crisis obligó a la suspensión de vuelos tanto nacionales como internacionales, manteniendo a Henry fuera del país.
- La crisis ha llevado a Salvador a hacer un llamamiento a todas las partes involucradas en Haití para que inicien "un diálogo interhaitiano pacífico y constructivo", en palabras de Stéphane Dujarric, portavoz del secretario general de la ONU, durante una conferencia de prensa.
Esta urgencia se ve reforzada por el anuncio del presidente keniano, William Ruto, sobre la preparación de Kenia para liderar la mencionada misión en Haití, respondiendo al grave escenario humanitario que la violencia ha exacerbado. La paralización de las actividades en el principal puerto de Haití complica aún más el envío de asistencia humanitaria vital.
La ONU ha destacado el peligro de colapso que enfrenta el sistema sanitario haitiano, con centros médicos cerrando o reduciendo significativamente sus servicios debido a la escasez de medicamentos y a la inseguridad que impide a los trabajadores sanitarios llegar a los hospitales. Esta misma situación afecta a las instituciones educativas del país.
Con un reciente repunte de violencia en Puerto Príncipe, protagonizado por bandas criminales en lucha por el control de la capital y la fuga de 4.500 reclusos de la principal prisión, la tensión se intensifica. Jimmy Chérizier, conocido como 'Barbecue', líder de una de las bandas más temidas, ha amenazado con empujar al país hacia una guerra civil si el primer ministro Henry no renuncia.
Ante este panorama, la comunidad internacional observa de cerca, esperando acciones concretas que puedan restaurar la paz y la seguridad en Haití, un país marcado por la violencia y la inestabilidad.