Telescopios Espaciales Confirman la Fiabilidad de las Mediciones, Pero el Misterio Perdura en la Evolución del Universo
MADRID, 11 de marzo de 2024.Los telescopios espaciales Hubble y Webb, colaboradores invaluables en la exploración del cosmos, han logrado un hito significativo al confirmar la precisión de las mediciones sobre la constante de Hubble y, al mismo tiempo, intensificar el enigma conocido como la tensión de Hubble.
La constante de Hubble, que define el ritmo de expansión del Universo, es esencial para comprender la evolución y el destino final del cosmos. Aunque el Hubble ha reducido las incertidumbres en esta medición durante sus 34 años de servicio, persiste una discrepancia, llamada tensión de Hubble, entre las mediciones basadas en diversos indicadores de distancia y el valor predicho a partir del resplandor del Big Bang.
El Telescopio Espacial Hubble, lanzado en 1990, desempeñó un papel crucial al proporcionar mediciones precisas de la tasa de expansión del Universo. Sin embargo, estas mediciones no concuerdan con las obtenidas por otros métodos, como el mapeo del satélite Planck de la ESA.
En respuesta a esta tensión, el Telescopio Espacial James Webb entró en escena para verificar las mediciones del Hubble. Las observaciones infrarrojas de Webb confirmaron la exactitud de las mediciones ópticas del Hubble, eliminando dudas persistentes, destaca Europa Press.
A pesar de esta confirmación, la tensión de Hubble sigue siendo un enigma para los cosmólogos. La posibilidad de que exista un malentendido fundamental sobre el Universo se plantea, y la pregunta sobre si se requiere nueva física o si los errores de medición son la causa persiste.
Las observaciones infrarrojas de Webb confirmaron la exactitud de las mediciones ópticas del Hubble, eliminando dudas persistentes.
Adam Riess, físico de la Universidad Johns Hopkins y Premio Nobel, destaca que, una vez descartados los errores de medición, queda la intrigante posibilidad de un malentendido fundamental sobre el Universo.
La observación inicial de Webb en 2023 respalda las mediciones del Hubble, demostrando que la tensión de Hubble no se debe a imprecisiones en la "escalera de distancias cósmicas".
La combinación de datos de Webb y Hubble abarca desde las mediciones más cercanas hasta galaxias lejanas, refutando la especulación de errores invisibles en las mediciones a mayores distancias.
Aunque se confirma la fiabilidad de las mediciones del Hubble, el misterio persiste y se espera que futuras misiones, como el Telescopio Espacial Nancy Grace Roman de la NASA y la misión Euclid de la ESA, arrojen luz sobre la evolución cósmica que aún no comprendemos por completo.
Los resultados de esta investigación fueron publicados en la edición del 6 de febrero de 2024 de The Astrophysical Journal Letters.