Trump evalúa con cautela el equilibrio entre su base conservadora y los republicanos moderados en la selección de su compañero de fórmula
Domingo 17 de marzo de 2024.-La postura sobre el aborto se convierte en un elemento crucial en las deliberaciones de Donald Trump mientras considera a su candidato a vicepresidente para las próximas elecciones de noviembre. El ex presidente de Estados Unidos reconoce el delicado equilibrio que debe mantener, ya que una elección demasiado radical podría alienar a los republicanos moderados, necesarios para su regreso a la Casa Blanca.
En este complejo escenario, figuras como la gobernadora de Dakota del Norte, Kristi Noem, han surgido como opciones populares, pero su posición extrema en contra del aborto podría ser contraproducente para la estrategia electoral de Trump. Noem ha sido una ferviente defensora de la prohibición del aborto en su estado, lo que podría ponerla en desventaja en la carrera por la nominación a la Vicepresidencia, destaca Europa Press.
Trump, por su parte, está considerando una postura más moderada, abogando por una prohibición del aborto pasadas las 16 semanas de embarazo con excepciones como incesto, violación o riesgo para la vida de la madre. Esta posición refleja un intento por parte del magnate de equilibrar las demandas de su base conservadora con las expectativas de los republicanos moderados.
La posición sobre el aborto, factor fundamental en la elección de Trump sobre su candidato a vicepresidente. Trump apostaría por una opción relativamente moderada a sabiendas del precio que tendría que pagar entre su base ultraconservadora
La cuestión del aborto ha sido un tema sensible para Trump y sus seguidores más leales, quienes esperan una postura más restrictiva. Sin embargo, el presidente ha demostrado una inclinación relativamente aperturista hacia el derecho al aborto en comparación con la postura tradicional del ala ultraconservadora y religiosa de su partido.
A pesar de las tensiones internas, la victoria abrumadora de Trump en las primarias ha llevado a varios grupos antiabortistas a aceptar su postura provisional, que busca el consenso como vía principal. Este enfoque ha sido respaldado por líderes conservadores, quienes ven en Trump un mediador capaz de encontrar un terreno común en este polémico tema.
Con menos de ocho meses para las elecciones, el tema del aborto sigue siendo objeto de discusión entre Trump y sus posibles candidatos a vicepresidente, aunque ninguno ha revelado claramente su posición.
Esta incertidumbre ofrece una oportunidad estratégica para los demócratas, quienes esperan que Trump sea presionado para seleccionar a candidatos con posturas extremas sobre el aborto, lo que podría beneficiar su campaña.
