El candidato presidencial del PRM afirma que las reformas y la estabilidad actuales son la clave para un crecimiento económico sostenido.
Santo Domingo. – En un reciente encuentro con la Cámara Americana de Comercio de la República Dominicana (AMCHAMDR), el candidato presidencial por el Partido Revolucionario Moderno (PRM), Luis Abinader, proyectó un futuro económico prometedor para la República Dominicana, asegurando que bajo las actuales políticas de reforma económica, consolidación institucional y crecimiento sostenido, la economía del país podría duplicarse para el año 2036.
Abinader, quien habló este miércoles en el ciclo de almuerzos con los candidatos organizado por AMCHAMDR, se mostró optimista sobre el potencial económico de la República Dominicana, subrayando que el país ha experimentado un crecimiento económico impresionante, superando el promedio de América Latina con un crecimiento anual del 6.7% durante los tres últimos años. Este rendimiento, destacó, ha sido posible gracias a la dedicación y el trabajo conjunto de todos los sectores productivos y políticos del país.
El candidato resaltó también las significativas mejoras en la institucionalidad del país, mencionando los avances en la lucha contra la corrupción y la eficacia del gobierno. Abinader enfatizó que estos esfuerzos han mejorado notablemente la percepción internacional sobre la República Dominicana, contribuyendo a atraer inversiones extranjeras directas en proporciones históricas y fortaleciendo la economía nacional.
Otro aspecto clave de su discurso fue el papel de las zonas francas en el desarrollo económico dominicano, las cuales, según Abinader, han generado más de 197,000 empleos directos y han experimentado un crecimiento impresionante en las exportaciones. Estos logros, afirmó, reflejan la confianza de los inversionistas en la economía dominicana y el clima favorable para los negocios creado por su administración.
Abinader también tocó puntos críticos como la modernización y el desarrollo de infraestructura clave, incluyendo el transporte urbano y los puertos, lo que, según él, ha permitido a la República Dominicana posicionarse estratégicamente como un centro logístico de clase mundial. Citó proyectos de desarrollo regional en Pedernales, Cabo Rojo, Manzanillo, y el Gran Santo Domingo, subrayando su importancia para el crecimiento y la diversificación económica.
La educación y la salud también fueron destacadas como áreas de progreso significativo durante su gestión. La adición de nuevos planteles escolares y la mejora de la infraestructura hospitalaria, junto con la expansión de la cobertura de seguros de salud, fueron presentados como ejemplos del compromiso de su gobierno con el bienestar de los dominicanos.
En su discurso, Abinader hizo hincapié en el trabajo conjunto con el sector privado y organizaciones como AMCHAMDR para promover la inversión y el desarrollo económico. Resaltó las oportunidades emergentes en sectores como el de semiconductores, impulsadas por iniciativas como el CHIPS Act de Estados Unidos, como ejemplos de cómo la República Dominicana puede integrarse en cadenas de valor globales de alta tecnología.
Concluyó reafirmando su visión de futuro para la República Dominicana, un país en el que el crecimiento económico, la estabilidad y la modernización continúen avanzando de la mano. "El pasado no vendrá al rescate del futuro", afirmó, instando a los dominicanos a abrazar el cambio y a trabajar unidos para construir un futuro próspero.
El evento contó con la presencia de figuras políticas clave, empresarios y representantes del sector público y privado, demostrando el amplio apoyo y la confianza en las propuestas de Abinader para el futuro de la República Dominicana.