La senadora concluye su mandato destacando la importancia de la política como herramienta de cambio social
SANTO DOMINGO. En una ceremonia llevada a cabo en el Ministerio de Relaciones Exteriores, Faride Raful, senadora del Distrito Nacional por el Partido Revolucionario Moderno (PRM), ofreció un detallado balance de su gestión durante el período 2020-2024. La senadora, quien ha marcado un precedente en el Senado por su cercanía con las comunidades y su activa participación legislativa, destacó la implementación de espacios de consulta con las juntas de vecinos, una iniciativa pionera que busca responder a las demandas específicas de los ciudadanos de su demarcación.
Durante sus cuatro años en el cargo, Raful ha sido una figura clave en la promoción de la participación ciudadana y la responsabilidad política. "Hicimos la promesa de ser una voz activa en el Senado y hemos cumplido manteniendo un contacto directo y constante con las bases de nuestro distrito", comentó la senadora. Su enfoque inclusivo ha facilitado la implementación de 19 proyectos de ley y 18 resoluciones, abordando temas cruciales como la lactancia materna, la reforma de la ley de contrataciones públicas, y la prohibición de la violencia de género.
Uno de los logros más significativos de Raful ha sido su esfuerzo en la titulación de más de 5,000 familias en el Distrito Nacional, incluyendo un destacado proyecto en el sector de la Ciénaga. Este proyecto, en colaboración con la Dirección de Titulación, no solo proporcionó seguridad jurídica a miles de familias, sino que también reforzó el compromiso del gobierno en proveer servicios básicos y mejoras infraestructurales a comunidades vulnerables.
En su rol como presidenta de seis comisiones de trabajo, Raful impulsó importantes discusiones y proyectos, incluyendo la histórica Ley de Ordenamiento Territorial, Uso de Suelo y Asentamientos Humanos. Su liderazgo en la Comisión Bicameral fue crucial para alcanzar un consenso entre múltiples sectores de la sociedad civil, culminando en la aprobación de la legislación después de dos años de consultas y trabajo conjunto.
"Rechazamos el uso del barrilito y nos concentramos en ser un canal entre el Estado y la sociedad, garantizando que nuestras acciones legislativas se traduzcan en bienestar social y ofreciendo una voz a quienes menos mecanismos tienen para hacerse oír", afirmó Raful. La senadora también enfatizó la importancia de seguir formando líderes políticos comprometidos con los principios éticos y la representación efectiva.
Con la conclusión de su mandato, Faride Raful deja un legado de compromiso y transparencia, habiendo establecido un modelo de gestión senatorial que prioriza la interacción directa con los ciudadanos y la implementación de políticas que reflejan las necesidades reales de la comunidad. Su llamado final es un recordatorio de la continua necesidad de innovación en la política y de la responsabilidad de los futuros líderes de seguir construyendo puentes entre las zonas más vulnerables y los tomadores de decisiones.