Naciones Unidas alerta sobre la alarmante crisis humanitaria en la frontera entre la Franja de Gaza y Egipto, mientras la comunidad internacional busca la reanudación de la ayuda.
9 de mayo de 2024.- Alrededor de 80.000 palestinos han huido de la ciudad de Rafá, en la frontera entre la Franja de Gaza y Egipto, tras el comienzo de la incursión militar del ejército israelí, que intensificó sus bombardeos y tomó el lado palestino del paso fronterizo, según informó la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA) este jueves.
"Desde que se intensificó la operación militar de las fuerzas israelíes el 6 de mayo, alrededor de 80.000 personas han huido de Rafá buscando refugio en otros lugares", anunció la agencia a través de su cuenta en la red social X, enfatizando que "la carga sobre estas familias es insoportable" y que "ningún lugar es seguro".
La UNRWA lamentó que "la gente enfrenta otro desplazamiento forzoso en la Franja de Gaza" y reiteró su llamamiento a favor de un alto el fuego, días después de decidir no evacuar a su personal de Rafá pese a las advertencias y el inicio de la incursión.
El miércoles, la agencia reportó el desplazamiento de 47.500 personas desde Rafá, quienes buscan refugio en instalaciones de la UNRWA en Tel Sultán y Al Mauasi, utilizando "vehículos, camiones, motocicletas y carros tirados por burros". Además, resaltó que durante la noche y la mañana siguientes hubo "una cantidad significativa de bombardeos" en el este de Rafá.
Ante esta situación, la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) afirmó estar en contacto con "todos los implicados" para permitir "la entrada de bienes, incluido combustible", pero la situación sigue siendo "extremadamente fluida" debido a los desafíos en medio de las hostilidades.
El ejército israelí anunció el control del lado palestino del paso de Rafá el martes, lo que suspendió las operaciones humanitarias y generó preocupaciones sobre el agravamiento de la crisis humanitaria. Las autoridades israelíes rechazaron una propuesta de alto el fuego aceptada previamente por Hamás, desencadenando esta operación.
El miércoles, el presidente estadounidense Joe Biden afirmó que dejará de enviar armamento a Israel en caso de que lleve a cabo una incursión a gran escala en Rafá, donde se refugian más de 1,4 millones de palestinos, la mayoría desplazados de otros puntos del enclave tras siete meses de ofensiva. Biden expresó su preocupación de que el armamento podría usarse para matar a civiles.