La literatura civilizada de los indígenas se conoce como la época precolombina y empieza con el contexto de cuando los invasores del territorio.
Por Martina Turbi Reynoso
Hablar de la cultura del territorio americano es adentrarse profundamente en las raíces de las etnias de los indígenas, mayas, aztecas, las cuales son importantes civilizaciones, que a través de sus cultura y su legado, hacen posible lo que se conoce de la cultura americana. En el año (1492), ocurrió la conquista de los españoles al territorio de América, encabezado por las bases navales del almirante Cristóbal Colón. Esta demarcación geográfica, se encontraba ocupada por los habitantes de las tribus, quienes lucharon por defender su tierra. ¿Pero qué tan devastadora fue esta conquista?. La ocupación e invasión del territorio fue tan devastadora que algunas etnias, clanes y ciudades, como México o Tenochtitlan, capitales de los Quichés de Guatemala, tuvieron perdidas tanto humanas como materiales, es decir, enfermedades, esclavitud, templos donde adoraban a sus dioses, estatuas, pinturas, incluso el impedimento de su propia lengua.
Los individuos, especialmente de la tribu Maya, eran poseedores de un extraordinario y notable conocimiento sobre los astros, incluso tenían un calendario y la habilidad de producir trabajos literarios y artísticos. Aunque su lengua era ágrafa, los Mayas tenían la habilidad de producir esta gama de conocimientos sólo a través de la oralidad y dibujos como medios de expresión.
La cultura de los Mayas, se centraba especialmente en el aspecto religioso y todavía prevalece en algunos pueblos americanos por medio de los cantos y leyendas. Destacándose en la literatura de estos escritos, que la etnia de los Mayas de Yucatán y los Quichés tienen una superior calidad en sus narraciones y sus ritos de historias que se comunicaban de forma oral de generación en generación. A modo de ejemplo del contenido de estos textos, predomina el aspecto o apariencia única de signos que representaban los datos económicos, noticias, geografía e historias.
La literatura civilizada de los indígenas se conoce como la época precolombina y empieza con el contexto de cuando los invasores del territorio, comenzaron a aprender la lengua indigena y transcribirla al español castellano ligado con parte de la lengua Quiché.
Las antiguas historias del Quiché
En el primer capítulo, se expone la ideología religiosa de los Quiché, desde el principio de los tiempos de la creación del mundo y como se encontraba este, desde el contexto de la tierra vacía y la existencia única de los mares y el cielo, analogicamente como el Genesis de la Biblia cristiana. En este caso, los Quichés tenían creadores esenciales, el formador Tepeu y Gucumatz, dos grandes sabios y pensadores naturales, según el libro de Popol Vuh, eran representados por “claridad y plumas verdes y azules y que juntos mediante la meditación, palabras y pensamientos llegaron a la conclusión de que debía de aparecer el hombre“. Además, incluyendo todo lo que rodeaba al hombre y lo que se haría para mantener su estancia y su comodidad.
Llevar a cabo la creación de su obra, no fue fácil para ellos, ya que, tenían la idea de hacerlo con barro, pero este elemento no sostenía la estructura y forma que querían darle a sus adoradores. Incluso debieron de consultar a Ixpiyacoc e Ixmucane, quienes eran adivinos que representaban “la abuela del día y la abuela del alba". Personalmente, imagino que fue muy estresante culminar con esa obra por la que tanto anhelaban, para que los adoraran y alimentarán. Era tan deseada su voluntad que consultaron a otros seres y los convencieron con la incitación de que el ser que querían crear, también los adoraría a ellos. Después de varias acepciones fallidas, pudieron crear a la figura de maíz, como describe el siguiente fragmento:
Esta figura de maíz, es imprescindible ante la cultura Maya, porque prevalece un sentido de importancia del maíz en su cultura, a pesar de que se narra la creación del hombre. En otro relato se evidencia que los hijos de Hunnapuh concebidos por la hermosa doncella " tenían la actividad de ir al milpa a labrar la tierra y recoger el maíz, pero, sucede que solo encontraron una planta de maíz, una sola, que no era suficiente para sustentarse". Pero, luego sucedió algo impresionante, ellos tomaron los hilos rojos que salían del maíz y lo tejieron en forma de canasta, sucediendo después que esta se llenó de maíz.
En esta misma línea se reflexiona que el ser humano ha de ser ligado a la naturaleza, en el libro se cuenta que las tribus tenían diferentes dioses como el sol y el fuego, pero a medida que fueron sucediendo las devastaciones naturales como el frío, los que adoraban al dios del fuego no tienen porque preocuparse ya que este calentaba su cuerpo a medida que se acercaban y otras como las lluvias y las neblinas hacían que se perdieran en el camino porque no podían ver hacia dónde se dirigen.
El equilibrio entre los humanos y los dioses es mutuo, es decir los dioses crean y suplen a los humanos, pero estos deben de alabarlos y exaltarlos. Desde los primeros relatos de los capítulos y todos los acontecimientos, se presentan una serie de circunstancias que se consolidaron física, espiritual y emocionalmente y a raíz de esto, en el pueblo Quiché se generó una confianza tan intensa, tan personal, que cuando veían que sus dioses los protegían del abismo de la muerte, por lo tanto, ellos se mostraban aún más agradecidos, por lo que hacían sacrificios de animales para agradar a su dios. Incluso cuando el maíz era su comida esencial por la conexión directa y sagrada hacia los dioses.
¿Este sentido de creencia de los Quichés, puede incidir en otras culturas? Tal vez sí, porque, en la mayoría culturas de siglos pasados, se percibe que todas las tribus debían tener un dios al que veneraran o un ser o figura que exaltara y representará su creencia.
En uno de los relatos del "Popol Vuh" se presentan las situaciones adversas y complicadas que pasaron los descendientes de Hunahpú. Los hermanos gemelos, cuando fueron llevados por los mensajeros búhos se enfrentaron en Xibalbá a los reyes del inframundo, los gemelos sufrieron múltiples pruebas oscuras, pero fueron inteligentes y capaces de contrarrestar las diversas situaciones en las distintas casas que entraron, como la casa de las navajas, la casa del fuego y la de los murciélagos.
Desde una panorámica literaria, la literatura del "Popol Vuh" detalla de manera minuciosa todos los acontecimientos y circunstancias a las que estuvieron expuestos el pueblo o tribu de los Quiché, se exhibe como un texto sagrado, ya que, es un patrimonio que describe las generaciones y descendencias de esta tribu. Siendo así, un legado impresionante que hace maravillarse al lector. Este conocimiento no se degenero ni desapareció, porque a pesar de las invasiones de los españoles, estos a través de su escritura hicieron trascender y preservar la ideología y mitología de los Mayas quienes persistieron y generaron su cultura, mediante sus narrativas de la vida, la creencia y la religión Maya.
Leer y analizar el "Popol Vuh" nos lleva a momentos donde la ideología de la creación y la rivalidad de los dioses eran ideas sumamente interesantes que cautivaban y se manifestaban de generación en generación. Estas creencias se reflejan en las acciones de la humanidad, especialmente en la rica cosmovisión de los mayas, caracterizada por una diversidad dedioses, rituales, tribus y luchas por territorios. Esta lucha por la supervivencia y la preservación de su cultura ha perdurado hasta nuestros tiempos. A través del discurso oral y,posteriormente, del escrito, hemos sido afortunados al poder conocer y preservar nuestro origen y la voz de las antiguas generaciones.
Referencia Bibliográfica
Recinos, Adrian. Colección popular: Popol Vuh, (Las antiguas historias del Quiché) https://campusvirtual.isfodosu.edu.do/pluginfile.php/308067/mod_assign/introattachment/0/Popol%20Vuh%20%282%29%20%281%29%20%281%29.pdf?forcedownload=1