Médicos Sin Fronteras denuncia "noche sangrienta"; Italia advierte que la ofensiva israelí está "sembrando un odio que afectará a sus hijos y nietos"
La cifra de muertos tras un bombardeo israelí en el campamento de desplazados de Barakasat, en la región de Rafá, Gaza, ha aumentado a 45. Este ataque se produce poco después de que la Corte Internacional de Justicia ordenara a Israel detener su ofensiva militar en la zona.
El Ministerio de Sanidad de Gaza calificó el bombardeo de "masacre", señalando que entre los fallecidos se encuentran 23 niños, mujeres y ancianos. Además, hay 249 heridos, y se teme que el número de víctimas aumente en las próximas horas. Según los servicios de Defensa Civil de Gaza, inicialmente se confirmaron 40 muertos y decenas de heridos.
El Gobierno gazatí denunció que Israel ha atacado diez campamentos en las últimas 24 horas, y recordó que estas zonas habían sido designadas como seguras por las propias autoridades israelíes. La Media Luna Roja Palestina reportó que muchas víctimas fueron trasladadas al hospital de Tal al Sultán y a hospitales de campaña, mientras que numerosos palestinos quedaron atrapados bajo las llamas y entre las tiendas destruidas.
Médicos Sin Fronteras (MSF) señaló en su cuenta en la red social X que decenas de víctimas fueron atendidas en un punto de estabilización traumatológica apoyado por la organización. "Estamos horrorizados por este acto mortal: demuestra una vez más que ningún lugar es seguro en Gaza. Urge un alto el fuego inmediato y duradero", reiteró MSF.
El Ejército de Israel admitió la autoría del bombardeo, argumentando que el objetivo era un complejo de Hamás en Rafá.
Martina Marchio, coordinadora médica de MSF en Gaza, describió la situación como una "noche sangrienta en Rafá" con múltiples bombardeos, incluido el ataque al campamento de desplazados. Confirmó que 180 personas llegaron al punto de estabilización, 28 de las cuales ya estaban muertas.
El Ejército de Israel admitió la autoría del bombardeo, argumentando que el objetivo era un complejo de Hamás en Rafá. Según el Ejército, el ataque se llevó a cabo contra terroristas de alto rango utilizando armamento de precisión basado en inteligencia preliminar. No obstante, reconoció que personas no involucradas resultaron heridas y afirmó que están revisando el incidente.
Advertencias y consecuencias Internacionales
El ministro de Defensa de Italia, Guido Crosetto, advirtió que la ofensiva israelí está "sembrando un odio que afectará a sus hijos y nietos" y subrayó la necesidad de discernir entre Hamás y la población palestina.
Crosetto destacó que la situación en Gaza podría desestabilizar aún más la región, afectando también a Líbano, donde Italia tiene militares desplegados.
Israel no está teniendo en cuenta "las dramáticas dificultades y los derechos de hombres, mujeres y niños inocentes que no tienen nada que ver con Hamás" ha dicho el ministro Crosetto.
Crosetto ha destacado que Israel "tenía que resolver el problema con Hamás" después de que la milicia palestina lanzara su ataque del 7 de octubre, en el que murieron casi 1.200 personas y otras 240 fueron secuestradas, si bien ha incidido en que "desde el primer día" Italia recalcó que el asunto "debía abordarse de otra manera".
De acuerdo con el ministro Crosetto, la población palestina está siendo "comprimida" e Israel no está teniendo en cuenta "las dramáticas dificultades y los derechos de hombres, mujeres y niños inocentes que no tienen nada que ver con Hamás". "Esto ya no es justificable", ha añadido.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, tambien se ha mostrado "indignado" por el ataque lanzado por las fuerzas israelíes sobre un campo de desplazados palestinos en la zona de Rafá, en el sur de la Franja de Gaza, y ha denunciado que "no hay zonas seguras" para los civiles.
"Estas operaciones deben cesar", ha reclamado el mandatario galo en un mensaje publicado en su cuenta de la red social X, donde ha reclamado "pleno respecto al Derecho Internacional" y ha abogado por un alto el fuego "inmediato" en la Franja de Gaza.
Afirman que un número no especificado de víctimas sigue "bajo los escombros" y "tiradas en las carreteras"
La ofensiva israelí en Gaza ha dejado ya más de 36,000 muertos y 81,000 heridos desde el 7 de octubre, según el Ministerio de Sanidad gazatí. En las últimas 24 horas, se reportaron 66 muertos y 383 heridos en siete ataques distintos.
Asimismo, ha afirmado que un número no especificado de víctimas sigue "bajo los escombros" y "tiradas en las carreteras", sin que los equipos de emergencia hayan podido recuperar estos cuerpos.
El ministerio ha solicitado a los familiares de los fallecidos y desaparecidos –que las autoridades gazatíes cifran en cerca de 10.000– que registren sus datos a través de un formulario en Internet para completar los balances. Con datos de Europas Press