La CNLCC insta al Gobierno a trasladar las comunidades de zonas costeras bajas, cauces de ríos y áreas propensas a deslizamientos de tierra.
El Comité Nacional de Lucha Contra el Cambio Climático (CNLCC) ha instado al Gobierno y a los municipios a reubicar de manera urgente los asentamientos más vulnerables del país, en un esfuerzo por preservar vidas y bienes frente a la inminente temporada de huracanes.
La organización subraya la necesidad de trasladar las comunidades situadas en áreas de alto riesgo, como zonas costeras bajas, cauces de ríos y áreas propensas a deslizamientos de tierra.
Según el CNLCC, las áreas más expuestas incluyen la franja costera desde Higüey hasta Pedernales en el sur del país, y recomienda una reubicación preventiva antes de que los huracanes causen estragos.
Este llamado a la acción se produce coincidiendo con el inicio de la temporada ciclónica el 1 de junio, que la Administración Oceánica y Atmosférica de los Estados Unidos (NOAA) prevé será muy intensa, con hasta 25 tormentas y 13 huracanes, 7 de los cuales podrían ser de categoría 3 o superior.
El comité enfatizó que la gravedad de la amenaza requiere que el presidente Luis Abinader convoque un Consejo de Gobierno para implementar medidas extraordinarias de prevención. La propuesta incluye declarar un estado de alerta nacional y adoptar políticas públicas para proteger a las poblaciones en mayor riesgo.
El CNLCC recordó los desastres causados por las tormentas Noel y Olga en 2007, que sin alcanzar la categoría de huracán, provocaron significativos daños y pérdidas humanas. Estas tormentas demostraron la vulnerabilidad del país ante fenómenos climáticos extremos, dejando lecciones cruciales sobre la necesidad de una preparación y respuesta eficaces.
Una de las lecciones más importantes provino de la acción preventiva de Hanoi Sánchez, alcaldesa de San Juan de la Maguana en ese entonces, quien evacuó a los residentes de áreas peligrosas antes de las tormentas, salvando vidas.
La CNLCC advierte que el cambio climático convierte esta marginalidad en una sentencia de muerte, afectando especialmente a mujeres y niños.
El comité subraya que la movilización debe ser planificada con anticipación, asegurando refugio, alimentos, agua y medicinas para las personas desplazadas.
Reconoce que reubicar a miles de personas en situación de marginalidad, especialmente en áreas urbanas densamente pobladas como el Gran Santo Domingo y Santiago, es un desafío monumental.
La CNLCC advierte que el cambio climático convierte esta marginalidad en una sentencia de muerte, afectando especialmente a mujeres y niños.
Entre las recomendaciones del comité se incluye la creación de un fondo especializado del 3% del PIB para prevenir y mitigar los impactos de los fenómenos climáticos extremos.
Además, se sugiere fortalecer los comités de prevención y gestión de riesgos en los municipios, para identificar y trasladar asentamientos vulnerables, y educar a la población sobre cómo actuar ante estos fenómenos.
El CNLCC también recomienda realizar ejercicios y simulacros con anticipación, involucrando a ayuntamientos, órganos de socorro, la Defensa Civil y la Oficina Nacional de Meteorología (ONAMET) para preparar a estas instituciones en la movilización y asistencia a la población.
Finalmente, el comité plantea que el país debe adoptar políticas públicas que aumenten su resiliencia ante el cambio climático. Estas incluyen la transición hacia energías renovables, un ordenamiento territorial efectivo, un plan nacional de viviendas para grupos vulnerables y la construcción de infraestructuras de alta calidad.
Además, se insta a eliminar las montañas de cenizas tóxicas de carbón de la termoeléctrica Punta Catalina, que representan un grave riesgo de contaminación durante eventos ciclónicos.
El CNLCC concluye que la implementación de estas medidas es crucial para evitar un retroceso significativo en el desarrollo del país y garantizar la seguridad de sus habitantes ante la creciente amenaza de los huracanes.