La NIRCam del Webb revela una alineación única de chorros protoestelares, proporcionando nueva información sobre el nacimiento de las estrellas
Madrid, 20 de junio (EUROPA PRESS) – Por primera vez, la cámara de infrarrojos cercana (NIRCam) del telescopio espacial James Webb ha captado una andanada de erupciones protoestelares alineadas en la nebulosa de la Serpiente. Estos fenómenos ocurren cuando los chorros de gas expulsados por estrellas recién nacidas chocan con el gas y polvo circundantes a gran velocidad.
Lo sorprendente es que, en esta región, todos los chorros están inclinados en la misma dirección y con el mismo ángulo, un fenómeno inusual similar al aguanieve cayendo durante una tormenta.
El descubrimiento, realizado por la ESA en colaboración con la NASA y la agencia espacial canadiense (CSA), está proporcionando nueva información crucial sobre los procesos de formación estelar. Según los astrónomos, estos chorros alineados pueden deberse a la influencia de campos magnéticos rotatorios y la dinámica de estrellas binarias que alteran la dirección de los flujos de salida.
La nebulosa de la Serpiente, con solo uno o dos millones de años de antigüedad, alberga un cúmulo denso de estrellas recién formadas en su centro. Estas observaciones del Webb destacan la presencia de hidrógeno molecular y monóxido de carbono en los chorros, visibles como rayas rojas brillantes en la imagen.
Además, esta región ha sido el sitio de descubrimientos anteriores, como la "sombra del murciélago", observada por el Telescopio Espacial Hubble en 2020. Los hallazgos iniciales del equipo han sido publicados en el Astrophysical Journal, abriendo nuevas vías para comprender los primeros momentos de la vida estelar.