Nuevas técnicas podrían anticipar la diseminación y mejorar tratamientos oncológicos
Investigadores de Weill Cornell Medicine (EE.UU.) y un equipo internacional han utilizado biopsias hepáticas para identificar marcadores celulares y moleculares que podrían predecir la diseminación del cáncer de páncreas al hígado u otros órganos.
El estudio, publicado en 'Nature Medicine', sugiere que la información obtenida de una biopsia hepática durante el diagnóstico de cáncer de páncreas puede guiar a los médicos en la personalización del tratamiento, incluyendo inmunoterapias dirigidas al hígado, antes de que las células cancerosas metastaticen.
Actualmente, solo el 10% de las personas con cáncer de páncreas sobreviven más de dos años tras el diagnóstico inicial. "Si podemos predecir el momento y la localización de las metástasis, esto podría cambiar radicalmente el tratamiento del cáncer de páncreas, especialmente en pacientes con alto riesgo de metástasis", explicó David Lyden, coautor del estudio y catedrático en Weill Cornell Medicine.
Actualmente, solo el 10% de las personas con cáncer de páncreas sobreviven más de dos años tras el diagnóstico inicial.
En 2015, Lyden y su equipo descubrieron que las células del cáncer de páncreas secretan factores que preparan órganos distantes, como el hígado, para la formación de nuevos tumores. Para entender cómo estas alteraciones preparan el terreno para la colonización cancerosa, Lyden colaboró con Linda Bojmar y otros investigadores, obteniendo biopsias hepáticas de 49 individuos con cáncer de páncreas en estadio inicial y comparándolas con biopsias de 19 personas sin cáncer.
Biopsias hepáticas: detectando signos tempranos de metástasis
Los investigadores realizaron análisis moleculares, celulares y metabólicos de las biopsias para identificar rasgos distintivos que podrían preceder o prevenir las metástasis. Encontraron que los hígados de los supervivientes sin recidiva se parecían a los de personas sin cáncer, mientras que los que desarrollaron metástasis hepáticas en seis meses presentaban trampas extracelulares de neutrófilos (NET), densas marañas de ADN y enzimas liberadas por neutrófilos moribundos.
Los investigadores realizaron análisis moleculares, celulares y metabólicos de las biopsias para identificar rasgos distintivos que podrían preceder o prevenir las metástasis.
Indican que las NET están estrechamente relacionadas con futuras metástasis y podrían ser detectadas mediante imágenes radiológicas para identificar a los pacientes en riesgo de propagación agresiva.
"Estos individuos podrían recibir un ciclo completo de quimioterapia o, si las metástasis son incipientes, extirpar quirúrgicamente los tumores secundarios", explicó Lyden.
Respuestas inmunitarias y metástasis posteriores
El estudio también identificó dos categorías adicionales de pacientes: aquellos que desarrollarían metástasis hepáticas posteriormente y aquellos con cáncer diseminado a otros órganos, como los pulmones.
Los pacientes con metástasis fuera del hígado mostraban una fuerte respuesta inmunitaria contra el cáncer, lo que sugiere que podrían beneficiarse de la inmunoterapia para reforzar su respuesta antitumoral.
En contraste, aquellos con metástasis hepáticas posteriores acumulaban células inmunitarias agotadas metabólicamente, indicando un intento fallido del hígado por protegerse.
Los investigadores planean validar sus hallazgos en una cohorte más amplia y explorar la aplicabilidad de este enfoque en otros tipos de cáncer recién diagnosticados.
"Esperamos desarrollar una herramienta para predecir qué pacientes con cáncer colorrectal desarrollarán metástasis hepáticas basándonos en los perfiles celulares, moleculares y metabólicos de sus biopsias hepáticas", concluyó Robert Schwartz, coautor principal y profesor asociado en Weill Cornell Medicine. Con datos de Europa Press