La FAO subraya la necesidad de una inversión masiva para alcanzar el Objetivo de Desarrollo Sostenible del hambre cero para 2030.
Madrid, 24 de julio 2024 (EUROPA PRESS) – La Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) ha emitido una grave advertencia sobre el estado actual del hambre en el mundo. Según el informe presentado en la Reunión Ministerial del Grupo de Trabajo de la Alianza Mundial G20 contra el Hambre y la Pobreza en Río de Janeiro, el mundo está muy lejos de alcanzar el objetivo de acabar con el hambre para 2030.
El informe revela que durante el año pasado, 757 millones de personas pasaron hambre y 2.300 millones padecieron algún tipo de inseguridad alimentaria, cifras que no han mejorado desde el repunte observado durante la pandemia de coronavirus hace tres años.
Avances y retrocesos por continentes
La FAO destaca que, aunque en América Latina y el Caribe se han registrado avances notables con una disminución de más de tres puntos porcentuales en la población en inseguridad alimentaria desde 2022 (de 31,4% a 28,2%), la situación en África sigue siendo crítica. El continente africano mantiene la mayor proporción de población que pasa hambre (20,4%), comparado con el 8,1% en Asia, el 6,2% en América Latina y el Caribe, y el 7,3% en Oceanía. Se prevé que África albergará a más de la mitad de las personas que padecen hambre en el mundo en seis años.
Requerimientos de financiación y propuestas de acción
La FAO estima que se necesitarán "varios billones de euros" para afrontar los desafíos y transformar los sistemas agroalimentarios de manera que puedan soportar los principales factores que alimentan la inseguridad alimentaria y la desnutrición. De no hacerlo, el mundo enfrentará graves consecuencias sociales, económicas y medioambientales.
Para los países con capacidad limitada para acceder a los flujos de financiación, se recomiendan donaciones y préstamos en condiciones favorables. Los países con capacidad moderada podrían aumentar los ingresos fiscales internos, vinculando los impuestos a los resultados en materia de seguridad alimentaria y nutrición.
El informe también destaca la necesidad de mejorar la coordinación entre los actores y la transparencia en la recopilación de datos para focalizar el financiamiento de manera eficaz. "La actual arquitectura de financiación de la seguridad alimentaria y la nutrición está muy fragmentada y necesita una perspectiva más integrada", señala la FAO.
La FAO considera este informe una "llamada a la acción" y espera que influya en los debates sobre desarrollo y financiación en la Cumbre del Futuro, que se celebrará en septiembre de 2024 en Nueva York, así como en futuras conversaciones internacionales. "Un mundo sin hambre, inseguridad alimentaria y desnutrición es un mundo que vale la pena salvar, que vale la pena financiar y en el que vale la pena invertir", concluye la agencia de la ONU.