Planificaban ataques incendiarios en múltiples países
MADRID, 25 Jul. (EUROPA PRESS) – El Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU), junto con la Policía Nacional, informó que ha neutralizado un grupo de agentes del servicio secreto ruso que planificaban ataques incendiarios en diversos países europeos. Este grupo operaba desde territorio ucraniano, y sus objetivos incluían espacios con alta afluencia de civiles en Ucrania, Polonia y los países bálticos.
Detenidos y acusaciones
Los detenidos han sido acusados de "alta traición cometida bajo la ley marcial" y "falsificación de documentos". Las autoridades han iniciado una investigación, y los sospechosos podrían enfrentar penas de cadena perpetua. "Los principales objetivos del enemigo eran centros comerciales, gasolineras, farmacias y mercados", indicó un comunicado del SBU. Las operaciones de contrainteligencia se concentraron en el oeste de Ucrania, especialmente en Ivano-Frankivsk.
Detalles de la operación
La operación culminó con la detención del líder del grupo criminal, compuesto por casi una veintena de personas, y su cómplice, indica el informe. Las actividades de este grupo eran coordinadas a distancia por el servicio de inteligencia ruso.
"Los sospechosos reclutaban a personas a cambio de dinero para que cometieran atentados incendiarios contra objetivos civiles. Para encontrar a los posibles autores, utilizaban contactos personales en círculos criminales", señalaron las autoridades ucranianas.
Documentación falsa para perpetrar los ataques
El grupo del servicio secreto ruso proporcionaba documentación falsa a los reclutados, incluyendo pasaportes, permisos de conducción, certificados académicos y registros médicos. Esto permitía a los reclutados ingresar en territorio europeo de manera "legalizada" para perpetrar los ataques sin levantar sospechas.
Las autoridades ucranianas continúan trabajando en la investigación para desmantelar completamente la red y evitar futuros ataques. Esta operación destaca la colaboración entre los organismos de seguridad para enfrentar amenazas transnacionales y proteger la seguridad de los ciudadanos en Europa.
