Acusaciones de terrorismo en Bielorrusia y Rusia destacan en dos informe de Europa Press
En Bielorrusia, un alemán condenado a muerte por "terrorismo" ha declarado haber recibido órdenes de Ucrania y ha criticado a Berlín por "no hacer nada" para liberarle. En Turquía, un hombre detenido por su supuesto papel en un atentado con bomba lapa en Moscú afirma haber actuado tras contactar con los servicios de Inteligencia de Ucrania.
El ciudadano alemán, identificado como Rico Krieger, condenado a muerte por actos de "terrorismo" en Bielorrusia, afirmó en un vídeo haber recibido órdenes del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) para llevar a cabo operaciones en Minsk.
Según la agencia bielorrusa de noticias BelTA, Krieger dijo que "el SBU me usó para llevar a cabo tareas en Minsk" y especificó que le prometieron contactar con el Gobierno alemán y unirse a una formación militar extranjera.
Krieger confesó haber dejado una mochila con un explosivo en una estación de tren por órdenes de Ucrania, y se mostró "aliviado" de que el ataque no causara víctimas. "Fue el mayor error de mi vida, y probablemente el último", lamentó.
También criticó al Gobierno alemán por "no hacer nada" para ayudarle, expresando su deseo de que el presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, le conceda el perdón.
Detenido en Bielorrusia el 6 de noviembre, Krieger fue acusado de formar parte del regimiento 'Kastus Kalinovsky', opositores al presidente Lukashenko y a Moscú, que combaten junto a las fuerzas ucranianas.
Sin embargo, el regimiento negó la presencia de un alemán en sus filas. Alemania ha asegurado que Krieger recibe asistencia consular, pero su caso sigue sin resolverse.
Extraditado de Turquía a Rusia confesó trabajar para Ucrania, dice Moscú
En Turquía, el hombre identificado como Yevgeni Serebriakov, detenido por su supuesto papel en un atentado con bomba lapa en Moscú, afirmó haber contactado con los servicios de Inteligencia de Ucrania en febrero de 2023.
Según el Servicio Federal de Seguridad (FSB) ruso, Serebriakov confesó haber colaborado con un agente ucraniano conocido como 'Ilia', quien le proporcionó materiales para ensamblar un artefacto explosivo.
Serebriakov fue extraditado a Rusia desde Turquía y entregado al Comité de Investigaciones. En su confesión, relató que 'Ilia' le prometió una recompensa y la ciudadanía ucraniana a cambio de eliminar a un oficial ruso.
La explosión en Moscú, que ocurrió en un aparcamiento, dejó dos heridos. El objetivo era un coronel ruso que lidera una unidad del Estado Mayor del Ejército.
El caso de Serebriakov subraya la tensión y las acusaciones de espionaje y terrorismo entre Rusia y Ucrania, con detenidos que aseguran haber actuado bajo órdenes de los servicios de Inteligencia ucranianos.