El presidente Abinader lidera primer viaje en el Monorriel de Santiago
Santiago de los Caballeros, República Dominicana** – El Monorriel de Santiago, un sistema de transporte ferroviario de alta tecnología, ha comenzado a marcar un hito en la movilidad urbana de la República Dominicana. Con la capacidad de transportar hasta 20,000 pasajeros por hora en cada sentido y 200,000 pasajeros al día, este proyecto se erige como uno de los avances más significativos en el transporte público de la región.
El Monorriel recorrerá una distancia de 13.2 kilómetros, desde el populoso sector de Cienfuegos hasta Pekín, atravesando la ciudad sobre una estructura de vigas de hormigón armado conocida como Monovigas. Este viaducto aéreo, que cuenta con 14 estaciones y una terminal central de integración con la Línea 1 del Teleférico de Santiago, promete conectar los sectores de mayor población con los puntos estratégicos de la ciudad.
Con una velocidad máxima de 80 kilómetros por hora y un intervalo entre trenes de apenas 180 segundos, el Monorriel permitirá a los santiagueros desplazarse desde Cienfuegos hasta Pekín en tan solo 25 minutos.
Este nivel de eficiencia es una muestra del impacto que se espera del sistema, el cual beneficiará directamente a más de medio millón de ciudadanos. Entre los principales beneficios destacan la reducción en un 30% del gasto de transporte, la disminución de la congestión vehicular, un aumento en la productividad y una significativa reducción del impacto ambiental.
El sistema contará con 15 trenes Innovia 300, cada uno compuesto por cuatro vagones con capacidad para 580 pasajeros. La incorporación de esta tecnología coloca a Santiago y a la República Dominicana en una posición destacada en términos de transporte público en toda la región del Caribe y Centroamérica.
El 11 de agosto de 2024, el presidente de la República, Luis Abinader, lideró el primer viaje con pasajeros a bordo del Monorriel de Santiago, convirtiéndose en un evento histórico. Acompañado por la primera dama Raquel Arbaje, la vicepresidenta Raquel Peña, y otros altos funcionarios, el mandatario condujo el tren desde la Estación 3, ubicada en el Ensanche Espaillat, hasta la Estación No. 2 en San Lorenzo. Este primer recorrido, de aproximadamente dos kilómetros, se realizó a una velocidad reducida de 15 kilómetros por hora, como parte de las pruebas iniciales del sistema.
Este evento no solo representa un hito en el transporte público dominicano, sino que también reafirma el compromiso del presidente
Abinader con la modernización del sistema de transporte del país. La promesa de un sistema de transporte integrado en Santiago comenzó a materializarse en el año 2021 con la construcción de la Línea 1 del Teleférico, y continuó con el inicio de las obras del Monorriel en abril de 2022. Hoy, después de dos años y cuatro meses de trabajo, el Monorriel está más cerca de convertirse en una realidad tangible para los santiagueros.
Las pruebas dinámicas del Monorriel, sin pasajeros, comenzaron en mayo de 2024, marcando el inicio de una fase crítica del proyecto. Según el Fideicomiso para el Desarrollo del Sistema de Transporte Masivo de la República Dominicana (FITRAM), hasta la fecha se han completado 2,845 pilotes de un total de 4,034, 449 pilas de un total de 759, y 333 capiteles de un total de 708. Además, ya se han fabricado 9.8 kilómetros de vigas y se han instalado 5.1 kilómetros de ellas, demostrando un avance considerable en la construcción.
Jhael Isa, director ejecutivo del FITRAM, destacó que se está trabajando activamente en 13 de las 14 estaciones que conforman el proyecto. La única estación pendiente, la Estación Monumental, comenzará su construcción en septiembre de este año, según informó Isa durante el recorrido inaugural.
El Monorriel de Santiago no solo representa una innovación en términos de transporte, sino que también es un símbolo del progreso y la modernización que se están gestando en la República Dominicana. Con su integración al Sistema Integrado de Transporte de Santiago (SIT-Stgo), este proyecto apunta a transformar la manera en que los santiagueros se desplazan, mejorando su calidad de vida y posicionando a Santiago de los Caballeros como una ciudad modelo en el Caribe y Centroamérica.