Tribunal de San Pedro de Macorís dictó sentencia por violencia intrafamiliar
San Pedro de Macorís (República Dominicana). –El Tribunal Colegiado de San Pedro de Macorís condenó a 10 años de prisión a Fleimi Martínez Mejía, acusado de amenazar de muerte a su madre, Gisela Mejía, y a varios de sus familiares en hechos ocurridos en el Batey Soco, municipio Ramón Santana, durante el año 2022.
La sentencia se produjo tras un proceso judicial en el que la fiscalizadora Daviarys E. García Navarro, de la Unidad de Atención a Víctimas de Violencia de Género, Intrafamiliar y Delitos Sexuales, presentó pruebas contundentes que demostraron la gravedad de los actos cometidos por Martínez Mejía. Las acciones del condenado, que incluyen amenazas de muerte y acoso constante, violaron los artículos 309-2 y 309-3 literal e del Código Penal Dominicano, los cuales sancionan la violencia intrafamiliar.
El primer incidente ocurrió la noche del 12 de febrero de 2022, cuando Martínez Mejía se presentó en la residencia de su madre, ubicada en la calle Principal del Batey Soco, y la amenazó con apuñalarla, extendiendo sus amenazas a otros miembros de la familia, incluyendo a Rossana Feliz Mejía. Durante este episodio, Martínez Mejía dejó claro que no había ejecutado sus amenazas solo porque no había conseguido un arma de fuego.
Una semana después, el 19 de febrero de 2022, Martínez Mejía reincidió en su comportamiento violento. A la 1:00 de la madrugada, mientras consumía sustancias ilícitas en la casa de su madre junto a amistades, fue confrontado por su tía, Zoraida Brito Mejía, a quien también amenazó verbalmente, reiterando sus intenciones de matar a su madre.
El ambiente de miedo generado por las amenazas obligó a Gisela Mejía a abandonar su hogar por temor a su hijo. Finalmente, ese mismo día, Mejía acudió a la Unidad de Atención a Víctimas de Violencia de Género de San Pedro de Macorís, donde presentó una querella formal contra Martínez Mejía. La denuncia resultó en la detención y posterior sometimiento a la justicia del agresor.
Durante el proceso, Gisela Mejía fue evaluada por especialistas del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF), quienes confirmaron que las amenazas y el acoso de su hijo habían causado una profunda perturbación emocional, evidenciando el alto riesgo que representaba Martínez Mejía para su familia.
La condena de 10 años de prisión impuesta a Fleimi Martínez Mejía marca un precedente en la lucha contra la violencia intrafamiliar en República Dominicana, reafirmando el compromiso de las autoridades judiciales con la protección de las víctimas y el castigo ejemplar de los agresores.