Nueve capitales europeas se rebelan y bloquean evaluación económica de Rusia
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha decidido aplazar "indefinidamente" su esperada evaluación de la economía rusa tras la fuerte oposición de nueve países europeos: Lituania, Letonia, Estonia, Finlandia, Suecia, Islandia, Dinamarca, Noruega y Polonia.
Esos paises lanzaron un claro mensaje: no están dispuestos a permitir que el FMI, bajo su tradicional 'Artículo IV', brinde recomendaciones que fortalezcan indirectamente la maquinaria bélica rusa en su invasión a Ucrania.
En una carta dirigida a la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, los ministros de Finanzas de estos países expresaron su rotundo rechazo a los planes de la institución de analizar el estado de la economía rusa y ofrecer soluciones que podrían potenciar el régimen de Moscú en medio de la brutal guerra contra Ucrania.
Ese movimiento enérgico dejó al FMI sin más opción que suspender el proceso, alegando "razones técnicas" para el aplazamiento.
¿Evaluar la economía rusa o alimentar su guerra?
El bloque nórdico y báltico junto a Polonia no dudó en dejar claro que cualquier evaluación que sugiera mejoras económicas para Rusia podría interpretarse como un apoyo indirecto a su capacidad de financiar su esfuerzo militar.
El contundente rechazo detiene el primer intento del FMI de evaluar a Rusia desde la invasión de Ucrania en 2022, y abre un nuevo capítulo de tensiones entre el organismo multilateral y sus miembros europeos.
El director del FMI para Rusia, Alexei Mozhin, confirmó que la misión ha sido postergada, añadiendo que la "falta de preparación técnica" es la razón oficial, aunque el verdadero trasfondo radica en la creciente presión geopolítica.
Así, el FMI se encuentra atrapado en un callejón sin salida, obligado a aplazar indefinidamente una consulta que podría haber dado munición económica al Kremlin.
La maniobra de estos nueve países es un claro aviso: el FMI no puede operar bajo el radar político, y cualquier acción que pudiera beneficiar, aunque sea mínimamente, a la maquinaria bélica rusa será ferozmente rechazada.