El despliegue busca frenar la violencia entre Los Chapitos y Los Mayos
El Gobierno de México ha enviado 600 soldados al estado de Sinaloa para reforzar la seguridad y enfrentar la escalada de violencia causada por las facciones del Cártel de Sinaloa, Los Chapitos y Los Mayos. Este movimiento es parte de una estrategia coordinada entre los tres niveles de gobierno para controlar el aumento de asesinatos y enfrentamientos entre los grupos delictivos.
El gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha, confirmó la llegada de dos batallones adicionales a la capital del estado, que se integran a las fuerzas ya desplegadas en la región. "Estos elementos se suman al operativo para reforzar la estrategia conjunta y combatir la inseguridad que ha afectado a nuestra entidad", declaró Rocha.
El Ejército ha destacado que el objetivo de este despliegue es fortalecer las acciones operativas ya implementadas, con el fin de inhibir las actividades delictivas en zonas clave. La violencia en Sinaloa ha alcanzado niveles críticos en las últimas semanas, con un notable incremento en los asesinatos relacionados con la lucha entre los dos grupos delictivos.
Ocho asesinatos en 24 horas
En las últimas horas, la Fiscalía General del Estado reportó el hallazgo de ocho cuerpos en el sur de Sinaloa. Entre los incidentes más macabros, se encontraron cinco cadáveres junto a un parque acuático, sitio donde días antes se habían encontrado otros cuerpos con sombreros, en una aparente referencia al grupo de Ismael "El Mayo" Zambada.
Los cuerpos, con signos de tortura y algunos parcialmente desnudos, pertenecían a hombres menores de 35 años. Además, en las cercanías, se localizaron los cuerpos de dos hermanos, Kevin y Pedro N., secuestrados previamente por hombres armados.
Un octavo cuerpo fue descubierto en el sur de Culiacán, con las manos atadas a la espalda y heridas de bala. La identidad de este individuo aún no ha sido confirmada por las autoridades.
Oleada de violencia sin fin
Sinaloa, cuna del Cártel de Sinaloa, se ha convertido en el epicentro de una feroz lucha interna entre Los Chapitos, hijos de Joaquín "El Chapo" Guzmán, e Ismael "El Mayo" Zambada. La guerra de poder ha dejado decenas de muertos y sigue generando incertidumbre en la población local.