Ministra Faride Raful informa de 337 armas ilegales decomisadas en 3 semanas.
Santo Domingo.– La “Operación Garantía de Paz” ha demostrado ser un golpe contundente contra la violencia en la República Dominicana. En solo tres semanas de ejecución, los homicidios por conflictos sociales han caído a niveles históricos en 18 demarcaciones del país, dos más que la semana anterior, llevando la cifra de homicidios por debajo de un dígito en estas zonas críticas.
La ministra de Interior y Policía, Faride Raful, detalló los logros durante una rueda de prensa tras la reunión de la Fuerza de Tarea Conjunta, encabezada por la vicepresidenta Raquel Peña y el ministro de la Presidencia, José Ignacio Paliza.
Raful destacó que la clave del éxito ha sido la intervención territorial y la recuperación de 337 armas ilegales de las calles, un arsenal que alimentaba la criminalidad en el país.
“Podemos decir con certeza que los operativos han sido cruciales para reducir drásticamente los homicidios causados por la conflictividad social. Estas armas, que fueron retiradas de circulación, representaban un peligro inminente para la seguridad ciudadana”, afirmó Raful.
La ministra dejó claro que el desarme y la disuasión activa en los territorios más vulnerables han sido la piedra angular de esta estrategia, que ha transformado el panorama de seguridad en apenas tres semanas.
El impacto inmediato de la “Operación Garantía de Paz”
Raful dijo que la reducción de homicidios a un solo dígito en 18 demarcaciones no es un logro menor. Estas áreas, que hasta hace poco estaban plagadas de conflictos, ahora son ejemplo de cómo una intervención decidida y coordinada puede devolver la tranquilidad a comunidades azotadas por la violencia.
Añadió que los resultados reflejan una disminución sin precedentes en los indicadores de criminalidad, llevando a los habitantes de estas zonas a recuperar la confianza en las autoridades y en la posibilidad de vivir sin miedo.
Un arsenal fuera de circulación
El decomiso de 337 armas ilegales, como pistolas, rifles y escopetas, ha sido uno de los factores determinantes en esta disminución de la violencia. Estas armas, frecuentemente utilizadas en crímenes y ajustes de cuentas, han sido incautadas mediante operativos focalizados y acciones de inteligencia que han dado resultados contundentes.
Las autoridades no solo han quitado estas armas de las calles, sino que también han desmantelado redes de tráfico y distribución, atacando el problema desde su raíz.