El presidente de Brasil condena el uso de la fuerza sin respaldo legal y pide acciones frente a la crisis climática.
Nueva York. – El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, lanzó fuertes críticas al crecimiento del gasto militar mundial durante su discurso en la 79ª Asamblea General de las Naciones Unidas, afirmando que este incremento perjudica los esfuerzos globales para combatir el hambre y el cambio climático. “El uso de la fuerza, sin el respaldo del Derecho Internacional, se está convirtiendo en la regla”, advirtió.
Lula denunció que el gasto militar ha crecido por noveno año consecutivo, alcanzando los 2.000 millones de dólares en 2023, un triste récord en el contexto de los conflictos actuales. El mandatario destacó que estos recursos podrían haber sido destinados a enfrentar los desafíos más urgentes del planeta, como la crisis climática y el hambre que afecta a millones de personas.
Instan a Rusia y Ucrania a negociar la paz
En relación con la guerra en Ucrania, Lula reiteró la condena de Brasil a la invasión rusa, pero subrayó que ninguna de las partes puede lograr todos sus objetivos por medios militares. "Es crucial crear condiciones para retomar el diálogo directo entre las partes", afirmó, al tiempo que instó a la comunidad internacional a fomentar negociaciones de paz.
Lula también se refirió a otros conflictos en Oriente Próximo, Sudán y Yemen, y alertó sobre el peligro de una escalada en la región del Líbano, que podría arrastrar a todo Oriente Próximo a una guerra de mayor alcance. En cuanto al conflicto entre Israel y Hamás, criticó que el derecho de defensa israelí se haya transformado en una “venganza” que golpea a mujeres y niños, causando más de 40.000 víctimas fatales.
Alerta sobre la crisis climática y la desigualdad
El presidente brasileño también aprovechó su intervención para alertar sobre la incapacidad de la comunidad global para hacer frente a la crisis climática, lamentando que las cumbres y acuerdos alcanzados hayan sido ignorados. Propuso un enfoque multilateral para frenar a quienes se benefician de la degradación ambiental y destacó el liderazgo de Brasil en energías renovables, abogando por acelerar la descarbonización de la economía mundial.
Lula no dejó de lado la situación de América Latina, calificando el periodo desde 2014 como una "década perdida" marcada por el bajo crecimiento y la alta desigualdad. Criticó el embargo de Cuba y pidió una reforma de los mecanismos internacionales, como el Consejo de Seguridad de la ONU, para revitalizar su papel y adaptarlos a las realidades actuales.
En un mensaje dirigido a líderes empresariales y tecnológicos, como Elon Musk, Lula afirmó que "ningún Estado puede estar bajo las presiones de quienes se creen por encima de la ley", haciendo referencia a las recientes tensiones en Brasil por el cierre de X, la red social dirigida por Musk.