El Salón de la Fama del baloncesto fallece tras luchar contra un cáncer cerebral, dejando un legado imborrable.
Dikembe Mutombo, miembro del Salón de la Fama del Baloncesto y uno de los más temidos bloqueadores de tiros, falleció a los 58 años tras una larga batalla contra el cáncer cerebral, según informaron funcionarios este lunes. El pívot, conocido tanto por su dominio en la cancha como por su trabajo humanitario, fue también el primer "embajador global" de la NBA.
El comisionado de la NBA, Adam Silver, expresó su pesar por la pérdida de Mutombo, destacando la profunda huella que dejó tanto en el baloncesto como en la comunidad mundial. "Soy una de las muchas personas cuyas vidas fueron tocadas por el gran corazón de Dikembe y lo extrañaré mucho", afirmó Silver en un comunicado oficial.
Mutombo, nacido en la República Democrática del Congo, no solo se destacó como uno de los mejores jugadores defensivos de todos los tiempos, sino que también inspiró a jóvenes de todo el mundo, especialmente en África, donde impulsó proyectos de desarrollo y educación a través de su fundación. El ex presidente de Estados Unidos, Barack Obama, también elogió su legado, afirmando que "su trabajo como primer embajador global de la NBA cambió la forma en que los atletas piensan sobre su impacto fuera de la cancha".
Durante su carrera en la NBA, Mutombo bloqueó un total de 3.289 tiros, lo que lo colocó como el segundo mejor de todos los tiempos en esta categoría. Jugó en equipos como Denver Nuggets, Atlanta Hawks, Philadelphia 76ers, New Jersey Nets, New York Knicks y Houston Rockets, donde consolidó su reputación como un defensor implacable. Además, fue galardonado en cuatro ocasiones con el título de Jugador Defensivo del Año.
Famoso por su gesto de agitar el dedo tras bloquear tiros, Mutombo dejó una marca indeleble en la NBA, no solo por sus logros deportivos, sino también por su compromiso con mejorar la vida de las personas más vulnerables. El mundo del baloncesto y sus admiradores seguirán recordando su imponente presencia y su enorme corazón.