Las empresas buscan flexibilidad y resiliencia para enfrentar la incertidumbre global
Un reciente informe de KPMG revela que el 81% de las empresas que sirven al mercado de Estados Unidos están planificando reubicar sus cadenas de suministro en las Américas, impulsadas por una estrategia de "strategic shoring". Esta tendencia es una respuesta directa a la creciente inestabilidad política y económica mundial, que ha puesto de relieve la fragilidad de las cadenas globales y la urgencia de optimizar la cercanía y resiliencia operativa.
Strategic shoring: un enfoque integral para la eficiencia
El strategic shoring, definido como la relocalización de eslabones críticos de las cadenas de suministro hacia países cercanos a Estados Unidos, está ganando terreno rápidamente. Las empresas que implementan este modelo buscan mejorar la agilidad de sus operaciones, reducir costos y garantizar una respuesta más rápida ante imprevistos. Al centrar sus operaciones en las Américas, estas compañías pueden minimizar los riesgos relacionados con la disrupción de las cadenas globales, al tiempo que maximizan su eficiencia operativa.
En un entorno en el que el 66% de las organizaciones ve la incertidumbre política y económica como un desafío clave, el strategic shoring se convierte en una solución estratégica para salvaguardar las operaciones comerciales. El informe de KPMG subraya que el 76% de las empresas encuestadas ya están adaptando sus cadenas de suministro para alinearlas con esta tendencia, lo que refleja un cambio generalizado hacia la regionalización.
Reducción de costos y tiempos de entrega: un enfoque optimizado
Uno de los principales beneficios del strategic shoring es la capacidad de las empresas para reducir significativamente los tiempos de entrega y mejorar la capacidad de respuesta ante los cambios del mercado. El 76% de las organizaciones están priorizando esta estrategia para diversificar el suministro, acceder a talento más calificado y minimizar los riesgos relacionados con la logística global. Además, se espera que el número de ubicaciones involucradas en las cadenas de suministro en las Américas disminuya un 11% en los próximos tres años, lo que mejorará aún más la eficiencia operativa.
De acuerdo con KPMG, el 73% de las empresas ya ha logrado mejorar su desempeño operativo y financiero gracias a esta estrategia, lo que también ha promovido una mayor eficiencia en los costos de sus cadenas de suministro. Esto es particularmente relevante en sectores como el automotriz, la tecnología y la logística, donde las operaciones se ven afectadas por la volatilidad del comercio global.
El papel de los impuestos y la normativa en el strategic shoring
El entorno fiscal y regulatorio es otro aspecto clave en la toma de decisiones sobre la reubicación de cadenas de suministro. Más de la mitad de las organizaciones encuestadas, un 53%, señala que los reguladores y las autoridades fiscales juegan un rol determinante a la hora de implementar estrategias de strategic shoring, especialmente en lo que se refiere a la optimización tributaria. Estas compañías integran la planificación fiscal en las etapas iniciales del proceso, lo que les permite maximizar ahorros, optimizar el flujo de caja y asegurar una transición exitosa hacia sus nuevas estructuras de cadena de suministro.
En este contexto, México se destaca como una región privilegiada para la implementación del strategic shoring, no solo por su cercanía geográfica con Estados Unidos, sino también por sus acuerdos comerciales internacionales y su marco fiscal favorable. Esto convierte al país en un destino atractivo para las empresas que buscan optimizar sus costos operativos y cumplir con las normativas locales e internacionales.
La sostenibilidad como factor clave en la reubicación
Además de los beneficios operativos y fiscales, el strategic shoring también está teniendo un impacto positivo en la sostenibilidad de las empresas. El 71% de las organizaciones que han adoptado esta estrategia afirman que les ha permitido reducir su huella de carbono, gracias a la disminución de las distancias de transporte y la mejora de la eficiencia en la logística. Esto refuerza la tendencia hacia operaciones más sostenibles y amigables con el medio ambiente, alineando a las empresas con las crecientes demandas de sostenibilidad por parte de los consumidores y reguladores.
Al acortar las distancias de sus cadenas de suministro, las empresas no solo están logrando reducir costos, sino también minimizar el impacto ambiental asociado al transporte de larga distancia, lo que es especialmente relevante en sectores como el de bienes de consumo envasados, el automotriz y el farmacéutico.
Oportunidades y retos en Centroamérica
Centroamérica está posicionada como una región clave para capitalizar las oportunidades del strategic shoring. Países como Panamá y Costa Rica, junto con México, destacan por su infraestructura logística avanzada, su acceso a recursos naturales y su proximidad a Estados Unidos. El Canal de Panamá, en particular, facilita el flujo de mercancías y reduce significativamente los tiempos de entrega, ofreciendo una ventaja competitiva en la optimización de las cadenas de suministro.
Además, la región cuenta con una fuerza laboral calificada y bilingüe, lo que la convierte en un destino atractivo para empresas que buscan equilibrar la rentabilidad y la flexibilidad. Según Jaime Carrizo, Director de Servicios Tributarios de KPMG Panamá, “la ubicación privilegiada de Centroamérica, junto con sus tratados comerciales y recursos, proporciona una oferta que equilibra adecuadamente la reducción de costos y la eficiencia operativa”.
Sin embargo, las empresas que deseen implementar el strategic shoring en Centroamérica también enfrentan ciertos desafíos. La necesidad de garantizar un acceso constante a recursos naturales y energía, así como de contar con talento altamente capacitado, son algunos de los factores que las organizaciones deben considerar al evaluar sus estrategias de reubicación.
Conclusión: el futuro de las cadenas de suministro en las Américas
A medida que más empresas rediseñan sus cadenas de suministro para hacer frente a la volatilidad global, el strategic shoring se consolida como una estrategia clave para garantizar la resiliencia y competitividad en los mercados de Estados Unidos. Al centrarse en la proximidad geográfica y aprovechar los beneficios fiscales, logísticos y operativos de las Américas, las empresas pueden optimizar sus operaciones, reducir riesgos y mejorar su sostenibilidad a largo plazo.
La encuesta de KPMG pone de manifiesto que las compañías que adopten este enfoque estarán mejor preparadas para enfrentar los retos y aprovechar las oportunidades en un entorno comercial cada vez más incierto. Las empresas que prioricen la regionalización y la eficiencia en sus cadenas de suministro serán las que lideren el camino hacia una nueva era de operaciones ágiles y sostenibles.
Sobre la encuesta
The Proximity Premium de KPMG presenta el análisis de una amplia encuesta a 250 ejecutivos, realizada durante junio y julio de 2024, quienes tienen la experiencia adecuada para brindar información representativa sobre las realidades de la relocalización estratégica en el entorno actual.
Todos los ejecutivos tienen su sede en EE.UU. y trabajan para empresas que han trasladado algunas de sus operaciones de cadena de suministro a las Américas durante los últimos cinco años, lo están haciendo actualmente o planean hacerlo en el futuro cercano.
Todas las empresas tienen ingresos anuales mínimos de USD 1,000 millones, y provienen de sectores como fabricación industrial, bienes de consumo envasados, automotriz, atención médica, tecnología, comercio minorista, agricultura, logística y distribución, productos farmacéuticos y ciencias de la vida, transporte, telecomunicaciones, medios de comunicación y entretenimiento, energía y servicios públicos (incluidos petróleo y gas, electricidad, productos químicos y energías renovables), y aeroespacial y defensa.
