Propuestas buscan beneficiar a trabajadores y mejorar condiciones laborales.
Santo Domingo.- Los líderes sindicales Rafael "Pepe" Abreu, Gabriel del Río y Jacobo Ramos han expresado su apoyo a la Ley de Modernización Fiscal propuesta por el gobierno, destacando su potencial para beneficiar a los trabajadores si se implementa adecuadamente. Durante una conferencia de prensa, los líderes enfatizaron que el plan de compensación incluido en la ley podría impactar positivamente en las condiciones laborales de los dominicanos.
Abreu, presidente de la Confederación Nacional de Unidad Sindical (CNUS), consideró como un avance significativo el aumento del salario mínimo en el sector público, aunque también enfatizó la necesidad de incluir a los jubilados y pensionados que reciben pensiones de 10 mil pesos. Además, hizo un llamado a aumentar el salario mínimo en el sector privado a 30 mil pesos, argumentando que esto fortalecería la economía al aumentar la capacidad de compra de los trabajadores.
Sobre la indexación salarial, Abreu indicó que la reforma fiscal puede ayudar a los trabajadores dominicanos si se alinea con el Código Tributario y se aplica la indexación que no se implementa desde 2017. “Si se aplicara la indexación, el salario indexado estaría hoy sobre el monto de aproximadamente 54,000 pesos, beneficiando a muchos técnicos y profesionales”, explicó.
El dirigente sindical señaló que la reforma fiscal es un mandato de la Estrategia Nacional de Desarrollo, la cual ha sido pospuesta desde 2012. “No podemos seguir endeudándonos para cualquier obra; ese endeudamiento puede llevar a un colapso económico”, advirtió.
Gabriel del Río Doñe, presidente de la Confederación Autónoma Sindical Clasista (CASC), también calificó como positivo el aumento del salario mínimo, pero sugirió que debería incrementarse a 20 mil pesos para mejorar las condiciones de vida de los trabajadores. “Es positivo que se hable de mejoras salariales y de la eliminación de impuestos nuevos sobre alimentos básicos”, indicó.
Del Río enfatizó la necesidad de que la modernización fiscal no afecte a los más pobres con nuevos impuestos, sugiriendo que la carga fiscal recae sobre los más ricos. “Es urgente una reforma integral para que los dominicanos avancemos; los recursos deben provenir de quienes más tienen”, afirmó.
Jacobo Ramos, presidente de la Central Nacional de Trabajadores Dominicanos (CNTD), garantizó que los efectos de la reforma serán más positivos que negativos para el país. “El paquete de compensaciones incluye aumentos salariales en el sector público y privado, así como transferencias a los más pobres, lo que mitigará el impacto negativo de la reforma”, aseguró.
Ramos también propuso la ampliación del aumento salarial exento del impuesto sobre la renta, destacando que el monto actual, de 34 mil pesos, ha quedado desfasado por más de una década. “Es crucial actualizar este aspecto en la propuesta de reforma”, declaró.
Finalmente, los líderes sindicales coincidieron en que las obras que se ejecutarán con las recaudaciones de la modernización fiscal beneficiarán a la población. “Si hay mayor seguridad, habrá más inversión en la República Dominicana, lo que generará empleos. Debemos velar porque el gobierno cumpla con los compromisos establecidos en la reforma”, concluyó Ramos.
La Ley de Modernización Fiscal se presenta como una oportunidad crucial para mejorar las condiciones laborales y económicas en la República Dominicana, y los líderes sindicales están dispuestos a colaborar y supervisar su correcta implementación.