La crisis salarial y de seguridad agudiza los desafíos financieros de la compañía
Miami.-Boeing pierde actualmente alrededor de 100 millones de dólares diarios debido a la huelga de 33,000 trabajadores en sus plantas de Seattle, quienes continúan exigiendo aumentos salariales significativos.
Este paro, que se extiende por su segundo mes, llega en un momento crítico para la compañía, que ya enfrenta serios problemas de seguridad y una afectada reputación en el mercado.
Un panorama complicado para el gigante aeronáutico
Mientras tanto, la huelga laboral coincide con la filtración de planes para reducir la plantilla de la compañía en un 10%, lo que implicaría la pérdida de aproximadamente 17,000 empleos.
Kelly Ortberg, director ejecutivo de Boeing, confirmó el 11 de octubre que esta reestructuración ocurrirá en los próximos meses, reconociendo los profundos desafíos que enfrenta la empresa y subrayando la necesidad de decisiones difíciles para mantener su competitividad en el largo plazo.
Tensiones entre Boeing y sus empleados
La huelga de los trabajadores de Boeing ha captado la atención internacional debido a su prolongación y las demandas laborales en medio de un contexto económico y empresarial complicado.
Los 33,000 trabajadores que se encuentran en paro pertenecen al sindicato International Association of Machinists and Aerospace Workers (IAM).
Además de los aumentos salariales, los trabajadores también están solicitando mejoras en las condiciones de trabajo, lo que incluye mayor seguridad en las plantas y beneficios como mejores pensiones y seguros de salud.
Impacto en la producción
Los 100 millones de dólares por cada día de huelga, una cifra que afecta seriamente su flujo de caja y la capacidad de cumplir con los pedidos de aviones comerciales de Boeing . Esto se suma a la caída de un 41% en el valor de las acciones de la compañía desde principios de año, reduciendo su valor de mercado en aproximadamente 60 mil millones de dólares.
La huelga ha retrasado la entrega de cientos de aviones comerciales, lo que ha provocado incumplimientos en contratos con aerolíneas de todo el mundo. Esto podría derivar en multas o pérdidas adicionales si no logran resolver el conflicto a tiempo.
Problemas de seguridad y reputación
Boeing ha estado en el centro de críticas desde 2018, cuando dos accidentes de aviones 737 MAX resultaron en más de 300 muertos. Estos eventos llevaron a una prohibición temporal del modelo y afectaron gravemente la reputación de la empresa en términos de seguridad.
Los problemas persistentes, como la pérdida de parte del fuselaje de un avión de Alaska Airlines a principios de 2024, han aumentado las dudas sobre la seguridad de los productos de Boeing. Esto ha generado desconfianza entre aerolíneas, pasajeros y reguladores.
Futuro incierto para Boeing
Con la caída en las acciones y las pérdidas millonarias diarias debido a la huelga, Boeing enfrenta una de las crisis más grandes de su historia. La reestructuración de la plantilla, combinada con la pérdida de ingresos, está presionando a la empresa a tomar decisiones rápidas para sobrevivir en un entorno cada vez más competitivo.
La huelga de Boeing no solo refleja las demandas de los trabajadores por un salario justo, sino que se enmarca en un contexto más amplio de desafíos de seguridad, reputación y viabilidad financiera para una de las empresas más importantes del sector aeronáutico mundial.