Decisiones contundentes ante el horror de los abusos en la Iglesia.
El Papa ha decidido expulsar a tres miembros del Sodalicio de Vida Cristiana tras descubrirse “casos de abusos de cargo y autoridad”, así como de “abuso en la administración de bienes eclesiásticos, y abusos sexuales, incluso de menores”.
Los afectados con la decisión papal son: José Andrés Ambrozic, exasistente de Temporalidades, Comunicaciones y Apostolado y exvicario general; Ricardo Adolfo Trenemann; y Luis Antonio Ferroggiaro.
La expulsión de estos tres miembros se produce apenas un mes después de que el Papa tomara una medida similar contra diez miembros del mismo grupo.
La Nunciatura Apostólica en Perú ha emitido un comunicado al respecto, anunciando esta drástica medida. Destaca que “se ha considerado el escándalo por el número y la gravedad de los abusos denunciados por las víctimas”.
Esta decisión del Pontífice se produce tras una evaluación exhaustiva de las defensas presentadas en respuesta a las denuncias que surgieron durante la "misión especial" encargada al arzobispo de Malta, Charles Scicluna, y al oficial del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, Jordi Bertomeu.
La expulsión responde al descubrimiento de “casos de abusos de cargo y autoridad”, así como de “abuso en la administración de bienes eclesiásticos, y abusos sexuales, incluso de menores”. La gravedad de estas faltas exige una respuesta firme y decidida por parte de la Iglesia.
Los obispos de Perú, junto con aquellos de los lugares donde el Sodalicio está presente, expresaron su tristeza por los acontecimientos y pidieron perdón. “Nos unimos al sufrimiento de todas las víctimas y exigimos que esta sociedad de vida apostólica inicie de inmediato un camino de justicia y reparación”, señalaron.
Estas decisiones son un claro mensaje contra los abusos físicos, psicológicos y espirituales, así como el encubrimiento de crímenes que han manchado el nombre de la Iglesia. Con datos de Europa Press
