Veinte bases militares alcanzadas en tres horas sin daños colaterales
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) llevaron a cabo un ataque aéreo significativo contra objetivos estratégicos en Irán, completando con éxito una operación que abarcó tres horas. Según los informes de medios israelíes, se alcanzaron 20 sitios relacionados con la producción de misiles y sistemas de defensa antiaérea. El ejército israelí confirmó que todas las aeronaves regresaron a sus bases sin incidentes.
El ataque fue diseñado para eliminar amenazas inmediatas y reducir la capacidad de Irán de producir misiles que podrían poner en riesgo la seguridad de Israel. “Nuestra misión ha sido cumplida, y nuestros objetivos han sido alcanzados”, declaró un portavoz militar israelí. Esta operación no afectó instalaciones sospechosas de albergar armas nucleares, indicando un enfoque específico hacia amenazas militares convencionales.
Una ofensiva coordinada y precisa
Durante la operación, denominada “Yimi Tshuva”, participaron decenas de aviones de combate y de inteligencia, que realizaron múltiples oleadas de ataques a objetivos a 1,600 kilómetros de Israel. Además de destruir sistemas de producción de misiles, las FDI atacaron infraestructura defensiva antiaérea para garantizar la libertad operativa en futuras misiones aéreas.
Los resultados completos del ataque están pendientes de evaluación, pero las FDI afirmaron que la operación otorga una mayor libertad de acción en la región. “Hemos demostrado que podemos actuar en cualquier rincón del Medio Oriente para salvaguardar la seguridad de Israel”, añadió el ejército israelí.
Mensaje claro para Irán
El portavoz de las FDI, general de brigada Daniel Hagari, advirtió que Israel está preparado para una escalada si Irán decide intensificar las tensiones. “Frustramos amenazas inminentes contra el Estado de Israel con ataques precisos. Si Irán opta por responder, nuestra reacción será contundente”, subrayó Hagari en una declaración a medios internacionales.
Israel reiteró su intención de evitar una escalada regional mayor, aunque señaló que sus fuerzas están listas para actuar con decisión tanto en defensa como en ataque. “Quien amenace nuestra soberanía y busque desestabilizar la región pagará un alto precio”, puntualizó Hagari, subrayando la preparación del ejército para proteger tanto el territorio como la población israelí.
Escenario de alta tensión
El ataque se enmarca en un contexto de creciente tensión entre Israel e Irán, con ambos países en desacuerdo sobre la influencia regional y el programa nuclear iraní. Además, la intervención israelí refleja las preocupaciones por el posible apoyo de Irán a conflictos en Gaza y Líbano, donde milicias respaldadas por Teherán representan una amenaza constante para la seguridad israelí.
Esta operación relámpago reafirma la capacidad operativa de las FDI en escenarios complejos, enviando un mensaje inequívoco a sus adversarios regionales: Israel está listo para responder a cualquier amenaza de manera precisa y eficaz.