La Asamblea Nacional Revisora proclama una reforma histórica y trascendental
SANTO DOMINGO.- Este domingo, un acontecimiento histórico reverberó en el corazón del país con la proclamación de la nueva Constitución de la República Dominicana, un evento que marca un nuevo capítulo en la historia democrática de la nación. La Asamblea Nacional Revisora, encabezada por el senador Ricardo de los Santos, se reunió en el Congreso Nacional para dar formalidad a una reforma que promete fortalecer el sistema democrático y sentar las bases de un futuro más prometedor.
Durante su intervención, el presidente de la Asamblea, Ricardo de los Santos, destacó que esta reforma es el resultado de la visión de estadista democrático del presidente Luis Abinader.
La ceremonia, que tuvo lugar en el Salón de la Asamblea Nacional, estuvo marcada por la presencia del Presidente y la Vicepresidenta de la República, Luis Abinader y Raquel Peña. Asistieron también funcionarios, diplomáticos, empresarios y representantes de diversos sectores de la sociedad. El acto comenzó con una salva de 21 cañonazos, simbolizando la solemnidad y el significado del momento.
En su discurso, Abinader enfatizó que la nueva Constitución redefine el horizonte de la República Dominicana. “Quiero comenzar agradeciendo a los constituyentes su gran trabajo y a los ciudadanos que se integraron al proceso”, expresó, señalando que este esfuerzo colectivo demuestra el compromiso del país con la democracia.
Uno de los aspectos más relevantes de la reforma es la cláusula transitoria que limita la posibilidad de reelección del presidente electo en 2024, es decir, él mismo. Abinader subrayó este compromiso con la alternancia en el poder, destacando que su decisión de no postularse en el futuro representa un acto de convicción democrática.
“Aquellos que dudaron de que esto fuera posible tendrán que creer en mi palabra. Por primera vez en la República Dominicana, un presidente con la mayoría necesaria decide limitarse”, afirmó.
El presidente reiteró su compromiso de concluir su mandato el 16 de agosto de 2028, afirmando “no sigo más, nunca más para bien de la democracia dominicana”. Esta declaración fue recibida con aplausos por parte de los asistentes, quienes reconocieron la significancia de esta promesa en un contexto donde la continuidad en el poder ha sido una preocupación histórica.
Asimismo, Abinader destacó que las negociaciones y conveniencias políticas no han influido en la decisión de la reforma. “Quien ya fue electo en el 2016, como establecía la Constitución anterior, tampoco podrá volver a postularse”, reafirmó, consolidando un nuevo estándar en la política dominicana.
La proclamación de esta nueva Constitución se presenta no solo como un documento legal, sino como un reflejo del anhelo de un pueblo que busca una democracia robusta y sostenible. Este acontecimiento, sin duda, resuena en las aspiraciones de todos los dominicanos, marcando el inicio de una era que podría transformar la estructura política y social del país. La promesa de un futuro más democrático y participativo queda ahora plasmada en las páginas de la historia de la República Dominicana.