El exreceptor de Grandes Ligas reemplaza a Manny García y trae un nuevo cuerpo técnico.
SANTIAGO, REPÚBLICA DOMINICANA — El gerente General de las Águilas Cibaeñas, Ángel Ovalles, anunció este lunes la confirmación de Yadier Molina como el nuevo dirigente del equipo, en reemplazo de Manny García, para el resto de la temporada 2024-2025 en la Liga Dominicana de Béisbol.
Molina, un destacado exreceptor de Grandes Ligas, comenzará su labor de inmediato, integrándose al equipo en el enfrentamiento reasignado contra las Estrellas Orientales. Junto a él, se unirá Rafael Furcal como asistente, mientras que Carlos Gómez y TJ Peña se sumarán al cuerpo técnico como coaches de banca.
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El cuerpo técnico también incluirá a Edgardo Rivera como coach de bateo, Kleininger Terán como coach de tercera base, y Carlos Adrián Texidor, quien se encargará del infield. Además, los exgrandesligas Miguel Tejada y Melky Cabrera continuarán en sus roles de mentoría dentro del staff.
La decisión de nombrar a Molina llega tras una serie de resultados insatisfactorios bajo la dirección de Manny García, quien dejó un récord de 2 victorias y 7 derrotas. La directiva de las Águilas Cibaeñas agradeció a García por su entrega y dedicación, deseándole éxito en sus futuros proyectos.
Yadier Molina, nativo de Bayamón, Puerto Rico, cuenta con una vasta experiencia en el béisbol. Dirigió al equipo nacional de Puerto Rico en el pasado Clásico Mundial de Béisbol y ha acumulado experiencia como dirigente en la Liga Venezolana con los Navegantes del Magallanes y en la Liga de Béisbol Profesional Roberto Clemente con los Criollos de Caguas.
Durante su carrera en las Grandes Ligas, Molina militó por 19 años con los Cardenales de San Luis, donde ganó dos Series Mundiales y recibió nueve premios de Guante de Oro, cuatro Guantes de Platino y un Bate de Plata. Fue seleccionado en 10 ocasiones para el Juego de Estrellas, terminando su carrera con 176 jonrones, 1,022 carreras impulsadas y un promedio de bateo de .277. Además, estableció un récord al jugar 2,224 partidos detrás del plato, la mayor cantidad para un receptor en la historia de las Grandes Ligas.