La Dirección de Migración niega disminución en repatriaciones de haitianos
SANTO DOMINGO. – En una reciente declaración que ha generado controversia, el director de Migración de la República Dominicana, vicealmirante Rafael Lee Ballester, refutó las afirmaciones de la canciller haitiana, Dominique Dupuy, sobre una supuesta disminución en las deportaciones de ciudadanos haitianos.
Según Lee Ballester, la entidad sigue manteniendo un ritmo constante en la interdicción de inmigrantes irregulares, subrayando que hasta el momento no ha recibido instrucciones para modificar esta política.
“Estamos concentrados en hacer cumplir las leyes migratorias dominicanas, en atención al mandato expreso del presidente de la República”, afirmó Lee Ballester al ser consultado por el diario EL DÍA. Esta respuesta surge como reacción a las declaraciones de Dupuy, quien había sostenido que Haití había logrado una “reducción” en las repatriaciones desde territorio dominicano, lo que a su juicio refleja un avance en la relación entre ambos países.
La ministra de Relaciones Exteriores de Haití utilizó la red social X para comunicar su posición, acompañando su mensaje con un video que enfatiza su percepción sobre la situación. “Saludamos la reducción de las deportaciones, fruto de nuestros esfuerzos y de nuestra solidaridad con nuestros aliados. Haití aspira a un diálogo franco y respetuoso con República Dominicana, para una asociación donde cada nación encuentre sus ventajas”, escribió Dupuy en su publicación.
Sin embargo, la funcionaria no se detuvo ahí y también denunció lo que considera una política discriminatoria por parte del gobierno dominicano. Dupuy calificó de “discriminatorio” y “racista” el hecho de que, según ella, las deportaciones se llevan a cabo en función del color de piel de los afectados. “Es por el color de la piel de estas personas la razón por las que son expulsadas de República Dominicana”, dijo en el video, llamando a la comunidad internacional a prestar atención a la situación de los migrantes.
Además, Dupuy expresó su preocupación por el tratamiento que reciben los deportados, citando casos específicos donde bebés son separados de sus madres y niños menores de cinco años son dejados en la frontera en horas de la noche. “Al frente de algo que es inaceptable, nosotros no debemos mantener el silencio. Hubo un comunicado que anunció el inicio de deportaciones masivas, pero hay regulaciones que exigen el respeto de los principios y derechos humanos”, argumentó.
Las tensiones entre República Dominicana y Haití han sido un tema recurrente en la agenda política de la región, donde las cuestiones migratorias y de derechos humanos generan un debate intenso. La postura del gobierno dominicano se centra en la necesidad de hacer cumplir sus leyes, mientras que las autoridades haitianas abogan por un enfoque más humanitario y respetuoso.
La situación actual refleja la complejidad de las relaciones bilaterales, donde las preocupaciones sobre la migración se entrelazan con temas de derechos humanos y política exterior. A medida que ambos gobiernos buscan establecer un diálogo, las palabras de cada parte continúan resonando en un entorno ya cargado de tensiones históricas y sociales.
La dinámica de esta situación seguirá evolucionando, y ambos países tendrán que navegar por estos delicados asuntos en busca de soluciones que beneficien a sus poblaciones. Con una mirada hacia el futuro, la colaboración y el respeto mutuo serán claves para alcanzar una convivencia pacífica y equitativa entre República Dominicana y Haití.