La Guardia Revolucionaria asegura contar con armas suficientes para responder
MADRID, 6 Nov. (EUROPA PRESS) – La Guardia Revolucionaria de Irán ha anunciado este miércoles su disposición para una posible guerra con Israel, en un contexto de tensiones crecientes en Oriente Próximo. El subcomandante de la Guardia Revolucionaria, Alí Fadavi, advirtió que no se descarta la posibilidad de un "ataque preventivo" por parte de Estados Unidos y aseguró que Irán cuenta con suficientes recursos armamentísticos para responder a los bombardeos israelíes recientes.
Fadavi subrayó que tanto Irán como sus aliados en el denominado ‘eje de la resistencia’ están listos para un enfrentamiento con Israel, un país que, según él, “carece de la fuerza necesaria para hacer frente a Irán”. Según la agencia de noticias iraní ISNA, el subcomandante recalcó que la geografía de Israel es "pequeña" y que Teherán ya ha identificado “objetivos estratégicos” que serían atacados en caso de un conflicto directo.
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Esta declaración se produce tras el anuncio del ministro de Exteriores iraní, Abbas Araqchi, quien había expresado que Teherán responderá de forma “precisa y calculada” a los ataques israelíes ejecutados a finales de octubre. No obstante, Araqchi enfatizó que Irán "no busca una escalada de tensiones" en la región, pero tampoco dejará sin respuesta las acciones en su contra.
La situación en Oriente Próximo ha cobrado mayor relevancia tras la reciente victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos, lo que podría influir en la política exterior estadounidense hacia Irán. Este cambio de liderazgo en la Casa Blanca ha generado expectativas sobre una postura más dura de Washington hacia Teherán, particularmente en temas de seguridad en la región.
El reciente conflicto escaló cuando el Ejército israelí llevó a cabo ataques aéreos que dejaron cinco víctimas iraníes, entre ellas cuatro militares, en respuesta a un lanzamiento masivo de misiles balísticos desde Irán contra Israel a principios de octubre. Según el Ejército israelí, varias de sus bases aéreas fueron impactadas, aunque aseguraron que los daños fueron limitados debido a las interceptaciones realizadas.
La tensión sigue latente mientras ambos países permanecen en alerta máxima, incrementando la posibilidad de un enfrentamiento a gran escala en Oriente Próximo.